Barakaldo. La colocación de 56 pivotes en apenas un centenar de metros de la calle Arana de Barakaldo ha encendido los ánimos en el vecindario. Los residentes no se oponen a la adopción de medidas para evitar que los vehículos puedan aparcar en los laterales, pero opinan que en esta ocasión el Ayuntamiento "se ha pasado". Quieren que los responsables municipales revisen este despliegue de bolardos y reduzca su número. Por ello, han puesto en marcha una campaña de recogida de firmas en el barrio a través de varios establecimientos. De momento, ya han reunido alrededor de 120.
"Nos parece muy mal que hayan puesto tantos pivotes, porque suponen un obstáculo en el caso de producirse una emergencia", explica José Antonio, una de las personas que reside en esta calle próxima a la estación de tren y al bidegorri de la calle Dolores Ibarruri. "El día que tenga que entrar aquí un camión de bomberos o una ambulancia no va a tener espacio para dar la vuelta. Su única opción va a ser retroceder marcha atrás con el peligro que esa maniobra conlleva", recalca otro vecino de la zona.
Manoli regenta un negocio y tampoco ve con buenos ojos la actuación municipal porque "los repartidores van a tener dificultades a la hora de acceder" a realizar las labores de carga y descarga. "Yo entiendo que los hubieran colocado debajo de las ventanas para que no aparquen los coches, pero no estoy de acuerdo con esta actuación. Aquí al lado hay una logopedia y si viene una persona en ambulancia no puede acercarse hasta la puerta", añade. Los vecinos se quejan también de la imagen "antiestética" de estas piezas metálicas.
La recogida de firmas comenzó el sábado y se prolongará durante varios días antes de presentarlas en el Consistorio. No es la primera vez que los pivotes suscitan problemas en Barakaldo, donde muchas calles cuentan con algún elemento para evitar que los coches aparquen encima de las aceras o en segunda fila. De hecho, hace varios meses el comité de empresa de la firma de transporte público Encartaciones envió un escrito al alcalde, Tontxu Rodríguez, quejándose por la colocación de unos bolardos separando los dos carriles en la avenida de la Libertad.