El final del verano se acerca y con él también el temido cambio de armario. En Bilbao, los comercios están empezando a recibir los paquetes que contienen la ropa de la próxima temporada de otoño-invierno. Muchas de las tiendas de ropa del Casco Viejo se han mantenido cerradas por las fiestas, pero otras, han mantenido las persianas abiertas. Este es el caso de Olañeta, regentada por Susana Alguero, quien también ejerce de presidenta de la Asociación de Comerciantes, Hosteleros y Empresas del Casco Viejo. 

"A últimos de agosto o primeros de septiembre empezamos a recibir paquetes con la ropa de la nueva temporada. Este mismo lunes recibimos treinta cajas y después hemos recibido otras quince. Todo eso luego hay que sacarlo, lavarlo, plancharlo y etiquetarlo. Todo esto lo tenemos que hacer nosotros solos, no nos viene como en otras superficies que ya viene todo más o menos hecho y sólo hay que colocarlo", relata Alguero.

Sudaderas y chaquetas para todos

Por otro lado, muchas de las grandes marcas que cuentan con tiendas en la Gran Vía bilbaina ya han empezado a exponer artículos de cara a la próxima temporada, que se mezclan con lo que queda de la temporada estival. En estos momentos, lo que más hay de cara a la próxima temporada son sudaderas y chaquetas, tanto para hombre como para mujer, además de otros habituales como las transicionales o de entre tiempo, que son aquellas que valen para todas las temporadas, como los pantalones vaqueros. Alguero también admite que los productos estrella de la temporada invernal suelen ser "las cazadoras, los plumíferos, las prendas gordas, mucho jersey y pantalón".

"Aunque el tiempo no ha acompañado, es verdad que en agosto con la ola de calor la gente ha venido a comprar esos vestidos que todavía se resistían", relata Alguero sobre las compras estivales de última hora. Además, el Casco Viejo, cuenta con un mercado que se celebra a mediados de septiembre, Ganga Market, en el que se pueden comprar las prendas restantes del verano. "En el mercado lo que hacemos es que aprovechamos la ropa que tenemos todavía en stock de verano y la sacamos a precios todavía más reducidos", explica. 

Con el cambio de temporada a la vuelta de la esquina, los comercios bilbainos se esfuerzan por poner a punto sus escaparates, combinando el cierre de las rebajas estivales con la llegada de las prendas invernales. Una transición que, además de marcar el fin del verano, supone también un nuevo impulso para la actividad comercial en Bilbao.