La movilidad en clave ecológica da un salto cualitativo y cuantitativo importante este lunes en Bilbao con la confluencia de dos hitos. Por una parte, BilbaoBizi estrena el nuevo servicio con 790 unidades nuevas y 48 estaciones -se incorporan Zurbaranbarri 39 e Ignacio Ellacuría 6-, que irán ampliándose paulatinamente hasta sumar 1.250 unidades y 68 estaciones a partir del año que viene. Además, el domingo entró en vigor -aunque por tratarse de domingo su efecto práctico comienza a percibirse a partir de este lunes- el veto a los vehículos de tipo B a la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) delimitada en el centro de la ciudad.

La concejala de Movilidad y Sostenibilidad, Nora Abete, ha celebrado este domingo estos dos reseñables pasos para la ciudad en una nueva jornada de Domingos de Bicicleta celebrada en Basurto. “Las bicicletas son muy modernas, ágiles y seguras, y hemos comprobado que van muy bien”, asevera la edil, quien apunta que se trata de unidades con un sistema de anclaje más sencillo. Precisamente este era uno de los aspectos que más contratiempos suscitaba en el servicio anterior. “Con el problema de vandalismo tuvimos que implementar el candado trasero, lo que hizo que fueran más seguras pero más incómodas”, ha detallado. Las nuevas bicicletas, de color verde, no requerirán que se utilice el candado al depositarlas. “Lo tienen pero es para cuando haces una parada intermedia”, ha aseverado.

En ese sentido, la concejala ha admitido que el gran cambio en el servicio consistirá en la puesta en marcha del pago por uso dando por finalizada la tarifa plana que permitía a los usuarios pagar una cuota fija al año. “Quienes eran usuarios del anterior sistema ya han recibido un correo para descargarse la nueva aplicación y actualizar sus datos. En ese proceso podrán elegir si son usuarios habituales u ocasionales”, ha añadido Abete, quien apunta que, por lo demás, el uso de las bicicletas a través de la aplicación será muy similar. En el caso del abono anual para los usuarios habituales tendrá un coste de 25 euros anuales y, posteriormente, habrá diferentes tramos por tiempo. Estos usuarios nunca pagarán más de 72 euros anuales. Mientras tanto, los usuarios ocasionales pagarán un abono de 10 euros y no tendrán límite de pago.  

Coches de tipo B

Por otro lado, la Zona de Bajas Emisiones, en vigor desde hace un año para los vehículos de tipo A, se ha hecho este domingo extensiva a los de tipo B, lo que supondrá que el volumen de coches que no puedan acceder al centro de Bilbao crezca considerablemente. Según ha recordado Abete, en los estudios previos los vehículos de tipo A suponían un 14% de los que accedían a la ciudad. “Ahora sabemos que son en torno a un 3%. En el caso de los vehículos B, el porcentaje era de un 34% y ahora se sitúa en un 17%”, explica la concejala de Movilidad y Sostenibilidad, quien lo argumentó señalando que estos datos evidencian que desde que se llevó a cabo dicho estudio el parque circulante se ha ido rejuveneciendo. No obstante, ha insistido en algunas de las excepciones para la prohibición a los vehículos B: “Se les da la opción de circular si van a un parking rotatorio”.

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En esa línea, Abete destaca la importancia de la pedagogía, ya que aunque la normativa lleva en vigor un año, continúan atendiendo dudas de muchos conductores a los que, finalmente, no les afecta ninguna restricción. En este tiempo, la concejala asegura que “se ha mejorado la calidad del aire, han entrado menos coches y otro objetivo que es consecuencia de todo esto es que más personas están utilizando el transporte público”. Así ha expuesto que la calendarización para mejorar esa calidad del aire llevaba a cabo por el Ayuntamiento de Bilbao tiene el horizonte puesto en 2030, como marca la Unión Europea. “Serán las mediciones las que nos indiquen si hay que llevar a cabo alguna ampliación”, ha concretado con respecto a la posibilidad de extender la ZBE a otros barrios de la ciudad, como ya se contempla en la ordenanza municipal.