El Ayuntamiento de Bilbao a través de su sociedad Viviendas Municipales ha iniciado las obras de una nueva promoción de alojamientos dotacionales en la zona de Ametzola.

Serán 93 viviendas en régimen de alquiler y rotación de inquilinos que componen la segunda fase de una iniciativa ya con experiencia de la primera tanda en la que un total de 66 alojamientos se encuentran actualmente todos ocupados desde mediados de 2021.

Según han indicado fuentes de la sociedad municipal se trata de apartamentos en régimen de alquiler social, con carácter rotatorio por un periodo de cinco años. Los precios de alquiler oscilan entre los 150 y los 350 euros al mes en función de los ingresos de la unidad convivencial que los ocupe. En la primera fase, el 50% de las viviendas, 33 pisos, están ocupados por personas menores de 30 años que cuentan con ingresos de trabajo iguales o superiores al salario mínimo interprofesional y hasta un máximo de dos veces este baremo.

Principalmente para jóvenes

Otros 18 pisos tienen como residentes a mayores de 65 años, entre las que se incluyen personas con discapacidad, con limitaciones de movilidad para las que están previstos seis alojamientos adaptados; y el 20% restante, 15 alojamientos, se reservan para personas con carencia sobrevenida de vivienda en situación de vulnerabilidad.

La idea del Ayuntamiento es mantener esta filosofía de ocupación para las nuevas vivienda a construir que tienen prevista su finalización a lo largo del año 2026 y que contarán su mayoría con una superficie de entre 30 y 40 metros cuadrados, además de instalaciones y servicios comunes.

Esta segunda fase será la continuación del edificio que acoge la primera y en todo su conjunto del edificio se prevé la construcción de unos 11.400 m2 distribuidos en planta baja y nueve alturas. Dispondrá de 852 m2 de espacio comunitario, además de 650 m2 de zona ajardinada.

El edificio dispondrá de certificado en eco-diseño. La generación de calor se realizará con una instalación de aerotermia de alto rendimiento, que produce calefacción por suelo radiante. Las lecturas de consumo se realizan de forma individualizada, del mismo modo que se realiza actualmente en los alojamientos que se encuentran habitados.