Bilbao ya siente el pulso de Aste Nagusia. Durante esta semana, las atracciones han comenzado a instalarse en el parque Etxebarria. Los feriantes, llegados desde todas partes del Estado, han trabajado contra reloj para tener todo a punto para la apertura de las barracas esta tarde. Antes de que el parque se llene de risas y adrenalina, cada atracción ha pasado por rigurosos controles de seguridad, con el objetivo de evitar accidentes como el que sucedió la semana pasa en Vigo en el que un hombre perdió la vida tras el desprendimiento de uno de los brazos de la atracción del saltamontes.
Euskadi cuenta con una de las normativas más avanzadas del Estado recogida en la Ley 10/2015 y en el decreto 17/2019. En cambio, en muchas comunidades del resto del Estado todas las inspecciones de seguridad se regulan todavía a través del Real Decreto 2816/1982 publicado hace 42 años.
INSPECCIONES Y DOCUMENTACIÓN
El proceso de revisión que estos días han llevado a cabo técnicos municipales incluye tres fases. En primer lugar, el Ayuntamiento se encarga de preparar un plano para distribuir la ubicación de las diferentes atracciones y tinglados gastronómicos. Todo ello, poniendo especial atención en mantener la seguridad, en los pasos de vehículos de emergencias y los accesos para las personas con movilidad reducida. Después, los industriales feriantes comienzan a asentarse en sus parcelas y es aquí cuando tienen que entregar los papeles exigidos por la regulación. “Respecto a la documentación estamos obligados a entregar el documento que acredita que hemos pasado una revisión anual, es como la ITV de las atracciones”, explicó José Luis Garcela, dueño de dos de las barracas de Bilbao. La ley también exige entregar otro informe técnico acreditativo del cumplimiento de las condiciones de seguridad relativas al menos, a la descripción de la atracción, instrucciones de montaje, mantenimiento, conservación y uso. Finalmente llega el control del montaje de la atracción. Revisiones de estructura, anclaje, las instalaciones eléctricas y pruebas de seguridad suelen ser parte de los controles una vez se finaliza el montaje de la noria, los caballitos o el pasaje del terror. También se llevan a cabo pruebas operativas. “El primer funcionamiento de la atracción es en el que van los técnicos de seguridad. Hasta que no dan el visto bueno no podemos ponerla en marcha”, añadió ayer jueves Garcela. Las instalaciones eléctricas son analizadas por operarios de Iberdrola, quienes avalan las condiciones y firman el permiso. En caso contrario no se les da energía y la instalación no puede operar. Aparte de estas inspecciones obligatorias, los propios feriantes suelen revisar todo el montaje y la estructura a diario. “Le damos mucha importancia a la seguridad y tenemos mucho cuidado con los niños pequeños sobre todo. Estamos muy pendientes en que los menores de ocho años vayan acompañados y con el cinturón”, subrayó Mikel Alzibar, uno de los trabajadores de los autos de choque.
Una de sus compañeras, Erika Arnaiz, sostuvo que “es muy recurrente ver casos en los que los padres o los abuelos les meten en los coches sin cinturón y sin ningún cuidado, por eso hay veces que les avisamos y ellos pasan de nosotros completamente. En esos casos no sería nuestra responsabilidad”.
Consideran que los accidentes en este tipo de instalaciones son casos muy excepcionales y que noticias como la del grave incidente de Lugo les afectan bastante. “En España ahora mismo hay unas 600 ferias y movemos diariamente a millones de personas. Estos casos nos afectan y aunque son muy excepcionales salen en las noticias. Al final son mecanismos, los coches también pasan inspecciones de ITV y pueden fallar”, señaló José Luis Garcela. Otro de los barraqueros añadía que “trabajamos a diario para que las personas puedan disfrutar de manera segura, no hay riesgo, les animamos a que vengan”. En caso de que ocurra alguna incidencia, el procedimiento establece que la atracción deberá permanecer cerrada hasta que la revisen los técnicos y sugieran el procedimiento a seguir.
También, las carpas, puestos y bares son chequeados por Protección en cuanto a toma de tierra, extintores y las certificaciones técnicas. La instalación eléctrica y anti incendios es revisada con frecuencia. Asimismo, los bares pasan durante toda la semana de fiestas controles de sanidad. En este caso ellos ya saben cuando van a recibir estas inspecciones al contar con la autorización administrativa previa por parte del Ayuntamiento de Bilbao.
En breve
Normativa avanzada. La normativa que regula las inspecciones y la seguridad de las atracciones de Euskadi está establecida por la Ley 10/2015 y el decreto 17/2019. En el resto del Estado, hay regulaciones de 40 años de antigüedad.
Control documental. Los feriantes están obligados a presentar la documentación de una inspección anual obligatoria que deben pasar todo tipo de aparatos mecánicos donde se montan personas .
Inspecciones. Los operarios revisan el anclaje, la estructura, las instalaciones eléctricas y los arneses una vez se finaliza el montaje de una atracción. En caso de que haya algún fallo o accidente el protocolo establece que la barraca deberá permanecer cerrada hasta que los inspectores lo comprueben.
Para evitar problemas
Iberdrola Con defectos no se otorga energía
Inspectores de la eléctrica son los encargados de que los cuadros de energía y las instalaciones se hallen en buenas condiciones.