Finalmente el futuro de las instalaciones de La Casilla y todo su entorno se desatasca. Así lo han anunciado esta mañana de miércoles el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, en un acto en el que ha explicado el último y definitivo paso conseguido para que el viejo pabellón polideportivo y el espacio urbano que le rodea entren definitivamente en el siglo XXI.
Se calcula que para principios de 2027 todo el complejo esté finalizado con unos plazos que estiman en 8 meses el periodo de redacción del proyecto y un año y medio posterior el de las obras de ejecución. Previamente a estos 26 meses de plazo transcurrirá otro medio año en el proceso de elección de la empresa concesionaria que el Ayuntamiento espera tener concluido al finalizar el presente ejercicio.
El alcalde ha concretado que "la creación del nuevo equipamiento deportivo debe suponer un impulso al desarrollo adecuado de la actividad deportiva en este entorno". También se ha fijado en lo que va a suponer para la trama urbana de su entorno al decir que también va a suponer "una clara mejora del espacio urbano en la zona aledaña que permita, con todo, convertir a La Nueva Casilla en un nuevo tractor económico para el barrio, la ciudad y el territorio". Finalmente lo ha definido como "un marcrocontrato".
"La Nueva Casilla se va a convertir en un nuevo tractor económico para el barrio, la ciudad y el territorio"
Ha sido el concejal del área de Obras, Planificación Urbana y Proyectos Estratégicos, Asier Abaunza, el que ha detallado cómo se ha llegado a este nuevo estado tras finalizar el proceso de Diálogo Competitivo con varias empresas interesadas en asumir las obras y posterior gestión de las instalaciones a generar. Una concesión que se va a prolongar 40 años para que sea rentable económicamente para la empresa que gane el concurso público
Historia reciente
Como se recordará el proyecto para modernizar el viejo pabellón y aprovechar para darle la vuelta a todo el entorno urbanístico que le rodea se planteó por el Ayuntamiento ya en 2022. Entonces, en febrero, Asier Abaunza presentó el procedimiento que iba a seguir el Ayuntamiento de Dialogo Competitivo. Esta formula consiste en la definición del proyecto de La Nueva Casilla y su futura explotación que se prevé pase por un modelo de concesión de obra. Una fórmula similar a la que el Consistorio ya utilizó para proyectar y construir la Intermodal en Basurto.
Sin embargo, las seis empresas constructoras con las que el Ayuntamiento contactó para que plantearan sus proyectos constructivos y financieros no lo vieron claro con las condiciones iniciales expuestas por el Consistorio.
Así en principio, el plan era tener listos los pliegos para sacar a licitación la obra y la concesión de La Nueva Casilla a principios del verano de 2023. Pero no pudo ser prolongándose el proceso con varias fechas que no llegaron a cumplirse, al menos hasta ahora. Como entonces son tres los objetivos a conseguir que ha desgranado esta mañana Abaunza.
Polideportivo compacto
Por un lado, el de crear un polideportivo compacto moderno en el centro de la ciudad, que sustituya al vetusto pabellón actual al que se puede sacar poco rendimiento. Esta infraestructura deportiva contará con un mínimo de instalaciones que puede ampliarse según el proyecto que presente la empresa concesionaria ganadora.
Así La Nueva Casilla contará con pista polideportiva mínima para la práctica de diversos deportes y unas gradas mínimas con asiento para 300 personas. También ofertará salas especializadas de actividades en grupo de 300 y 200 metros cuadrados, otra de musculación o fitness de entre 200 y 800 metros cuadrados además de la imprescindible piscina.
Este espacio tendrá una superficie mínima de 600 metros cuadrados, incluida la playa y dispondrá como mínimo de un vaso de 25 x 12,5 metros, válido para el entrenamiento y la competición de la natación en niveles básicos, así como para el recreo de jóvenes y adultos.
Todas estas instalaciones estarán operativas con las mismas condiciones de los polideportivos que gestiona la sociedad municipal Bilbao Kirolak y sus socios las podrán utilizar con las mismas tarifas que el resto de instalaciones en la villa
Revitalización urbanística
Otro de los elementos clave será la revitalización urbanística del entorno de la nueva infraestructura aumentando el espacio peatonal de la plaza y las calles aledañas, de Autonomía y Gordoniz, para conectar el nuevo espacio con los barrios cercanos.
Todo ello con la creación de un aparcamiento subterráneo de varias plantas por debajo del nuevo edificio polideportivo y del que de momento se desconoce el número de parcelas. "Dependerá de la propuesta ganadora de la licitación", ha indicado Abaunza
El que si permanecerá será el actual estacionamiento de residentes sito debajo de la plaza de La Casilla, aunque es posible que según el diseño final tengan que cambiarse las rampas de acceso al mismo. Esta oferta ampliada de estacionamiento busca "impulsar la actividad comercial de todo el entorno" ha dicho Asier Abaunza.
La guinda al pastel será la posibilidad de desarrollar otras actividades e instalaciones deportivas, culturales, recreativas y de dinamización, más allá de las establecidas en el programa funcional y equipamiento mínimo requerido.
Se respeta la altura del pabellón actual
Abaunza también ha explicado otros detalles como que "el nuevo pabellón no será más alto que el actual" aunque si crecerá soterrado debajo de las calles y la plaza "en función del proyecto que nos presente cada una de las empresas licitadoras". También tendrá un extensión mayor en la huella que cubra la nueva edificación.
Así respetando las dos calles que flanquean el actual bloque deportivo su estructura crecerá hasta conectarse con la calle Gordóniz ocupando el espacio que actualmente recoge una pequeña plaza triangular donde se encuentra la estatua de Mercurio del autor Casto Solano. "De esta manera se conectará directamente La Nueva Casilla con el parque de Ametzola creando un todo conjunto", ha añadido a DEIA el concejal Asier Abaunza.
