El Teatro Arriaga de Bilbao iniciará una "reflexión profunda" para tratar de atraer a nuevos públicos al equipamiento cultural. Así lo ha explicado el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Bilbao, Gonzalo Olabarria, en el pleno municipal que se celebra este jueves en la capital vizcaina, que ha señalado que se analizará la política de precios, estudiando nuevos descuentos para jóvenes y estudiantes de disciplinas artísticas.

El grupo municipal de EH Bildu había solicitado estudiar la posibilidad de que los descuentos para jóvenes, que ahora se facilitan para menores de 30 años, se amplíen también a los menores de 35. Y es que, según ha señalado su portavoz, Jone Goirizelaia, a pesar de que el teatro "ofrece una programación escénica de primera nivel", la ocupación media en 2018 fue del 61,77%, al año siguiente del 58,1% y del 66,18% el año pasado. "Aunque en los últimos años el nivel de aforo ha estado condicionado por la pandemia, el porcentaje medio de ocupación del teatro no alcanza el 100% ni actualmente ni tampoco antes de las restricciones de la pandemia", ha lamentado.

Por ello, ha planteado la posibilidad de establecer nuevos descuentos, "tal y como se hace no solo en otras ciudades del Estado sino también en Viena en Londres", donde se sacan a la venta entradas de última hora a un precio simbólico de una libra y existentes programas específicos para estudiantes de disciplinas artísticas. "Es algo que tenemos que analizar", ha propuesto Goirizelaia.

Finalmente, EH Bildu ha alcanzado un acuerdo con el equipo de gobierno para, precisamente, realizar un análisis de las políticas de acceso a las políticas del Teatro Arriaga, "con el fin de implementar nuevas modalidades de acceso dirigidas a jóvenes menores de 35 años y estudiantes de diferentes disciplinas artísticas".

Según ha explicado el concejal de Cultura, la necesidad de atraer a nuevos públicos no es cuestión nueva, sino que "se lleva debatiendo más de veinte años", aunque la pandemia ha tenido un efecto "notable" en la asistencia a los espectáculos. En este contexto, el Teatro Arriaga ya ha puesto en marcha diferentes políticas y estrategias para incrementar su cifra de asistentes, como los diversos programas de fidelización.

Sin embargo, los cambios que se han producido en los últimos años en la forma de consumir cultura exigen, en palabras de Olabarria, una "reflexión profunda" en torno a la política de precios del teatro bilbaino, con el objetivo de "recuperar las audiencias prepandémicas y consolidar nuevos públicos". El concejal ha señalado que los precios se van a ajustar no solo para que este no se convierta "en una barrera de acceso", sino también para explorar nuevas formas de fidelización y llegar a colectivos que habitualmente no acuden al teatro.

"No queremos llenar el teatro a toda costa", ha advertido eso sí Olabarria. "Tenemos unas líneas de programación equilibradas que combinan espectáculos dirigidos al gran público con otros más minoritarios, producción local e internacional, títulos más o menos comerciales; no se trata de tirar todo eso por la ventana. Se ha hecho un trabajo muy interesante en ese sentido pero es cierto que los gustos y los hábitos sociales cambian y este puede ser un buen momento para revisar nuestras políticas de precios y de fidelización".