Mientras que colegios mayores y residencias privadas no tienen remilgos a la hora de la convivencia y cuentan entre sus clientes a chicos y chicas sin problema alguno, en Bilbao también existe una oferta de alojamiento solo para mujeres que estudian carreras universitarias.

La protagonizan cuatro centros religiosos gestionados por ordenes de monjas que solo admiten féminas en sus establecimientos que en total suman 214 plazas.

La residencia con más número de habitaciones es la María Inmaculada, de la congregación religiosa del mismo nombre, y ubicada la calle Fontecha Salazar y que ofrece 76 plazas divididas en 34 habitaciones individuales con baño particular y otras 42 cuartos dobles con aseo. El centro admite a mujeres entre 17 y 25 años tanto estudiantes como trabajadoras.

Las religiosas de los Ángeles Custodios ofrecen otro establecimiento, en este caso en un precioso palacete sito en la avenida de las Universidades. Aporta 48 plazas en tres tipos de estancias, 15 privadas con aseo que ofrece ducha, lavabo e inodoro, seis dobles con baño compartido y 23 más individuales también con aseo compartido.

También mantienen servicio de atención femenina la orden religiosa Misioneras de María Puerta del Cielo en su complejo educativo Artagan de la calle Zabalbide, muy cerca del barrio de Arabella. Aporta 50 habitaciones individuales con baño propio y ofrece a sus huéspedes todas las instalaciones del centro aunque según se recoge en su página web el presente curso permanece cerrada.

Por último se encuentra la residencia juvenil de la Hermanas Trinitarias, sita en Txurdinaga y con 40 camas en habitaciones de uso privado con baño incluido. En todas ellas, el carácter religioso de las residencias centra la actividad e incluso los servicios de limpieza de la ropa y las habitaciones corre a cargo de las propias residentes.