Resulta difícil abstraerse de que el miércoles espera el primer partido de la final de la FIBA Europe Cup, pero el Bilbao Basket quiere hacerlo, se obliga a hacerlo, para la visita hoy al Andorra. La permanencia está muy bien encarrilada, pero los hombres de negro quieren mejorar puestos en la clasificación para asegurar su presencia en Europa de nuevo y el partido de hoy “es clave”, según dijo Jaume Ponsarnau. “Nos tiene que servir para ser mejores y preparar lo que tenemos la semana que viene. Espero que el equipo tenga la mentalidad y la motivación adecuadas”, apuntó el técnico catalán.
En el apartado físico, Tryggvi Hlinason aún sigue de baja, a la que se suma el capitán Xavi Rabaseda, que no podrá estar en Andorra por un virus que le ha provocado fiebre. Algunas molestias físicas han provocado “una semana complicada de trabajo”. En cambio, regresa Marvin Jones, que “es un atleta en todos los sentidos y ha podido volver rápido. Está ilusionado con adaptarse a la realidad del equipo actual, que le puede venir bien a sus características”. Bassala Bagayoko seguirá formando parte del equipo ya que no hay que descartar a nadie antes de una cita ante un rival que, con la llegada de Joan Plaza al banquillo, “quiere ser más sólido en defensa y rebote y está apostando por un juego de transición más dinámico”.
El protagonismo de Jerrick Harding, máximo anotador de la Liga Endesa, se ha reducido en busca de “repartir el balón y los tiros entre más jugadores”. Shannon Evans y Kyle Kuric han mejorado su nivel y el Andorra ha podido sumar triunfos ante equipos importantes, pero su temporada sigue estando por debajo de las expectativas iniciales. Con todo, Ponsarnau ha planteado otro reto a sus jugadores que es el “ganar fuera de casa”. “Hemos estado en casi todos los partidos, pero nos han faltado detalles en momentos claves. Queremos encontrar esa solidez que nos permita competir con garantías”, apuntó el entrenador del Bilbao Basket.
Sylla, agradecido
Amar Sylla, una de las sensaciones por su rendimiento reciente, También señaló que el duelo de hoy “nos tiene que servir para jugar mejor”. El pívot senegalés no se dio importancia por lo conseguido ya que “solo trato de estar preparado para hacer lo que necesite el equipo. Solo hay que seguir trabajando para mejorar”. Y agradeció la posibilidad de jugar una final: “Es algo que igual solo pasa una vez en la vida. En el Bilbao Basket me han dado oportunidades que no había tenido antes y eso lo valoro mucho. El entrenador solo me dijo que había que tener paciencia y la he tenido para esperar mi turno”.
Sylla subrayó que en la plantilla “todos los jugadores son importantes”, incluido Bagayoko, con el que ya coincidió en la etapa de ambos en el Real Madrid y el Fuenlabrada, respectivamente: “Me motiva y me alegra mucho estar con él. Encima es un talento africano, que no hay muchos en la liga. No es fácil sin jugar dos años y volver, siendo joven. Pero él lo está haciendo muy bien ahora”.