NOCHES como las vividas por el Surne Bilbao Basket en el WiZink Center el domingo provocan resacas desagradables, complicadas de digerir. La derrota sufrida por los hombres de negro en la cancha del Real Madrid (95-61) hombres de negrofue más áspera por las formas que por el fondo. Perder entraba dentro de la lógica, incluso hacerlo por una cantidad considerable de puntos, pero los de Álex Mumbrú La imagen ofrecida distó mucho de la pretendida, la resistencia visitante apenas se apreció durante cuatro o cinco minutos y el resto fue un castigo del que resulta imposible extraer algo positivo. El técnico catalán reconoció lo obvio tras el choque, esgrimiendo como atenuante la mala semana de entrenamientos como consecuencia de la falta en el trabajo diario de tres de sus piezas: Álex Reyes, Álex Galán y Tomeu Rigo.

Sin embargo, no hay tiempo para lamerse las heridas. El conjunto vizcaino está obligado a una reanimación casi inmediata porque en su horizonte asoman duelos fundamentales de cara a su particular objetivo de evitar el descenso. Sin ir más lejos, el próximo domingo recibe a un Monbus Obradoiro que solo suma una victoria más, abriendo así un carrusel de seis partidos antes de final de año de los cuales cuatro serán en el Bilbao Arena. Y visto lo visto, ahí es donde el Surne Bilbao Basket En esta fase del calendario también pasarán por el recinto de Miribilla el recién ascendido Río Breogán, gran sorpresa del curso por su notable rendimiento, el Gran Canaria y el Unicaja, con solo tres victorias pero con potencial para estar más arriba. Por contra, tocará visitar a un Valencia Basket que va recuperando lesionados y ya tiene balance positivo y a un Bitci Baskonia con problemas estos últimos meses pero siempre peligroso si encuentra la racha positiva.

El conjunto vizcaino no puede excusarse en la potencia de sus adversarios porque en ese aspecto casi todos ocupan un rango superior al suyo en base a factores presupuestarios, pero también es cierto que la clasificación deja claro que su arranque de ejercicio ha sido especialmente exigente. En las nueve jornadas ya disputadas, los hombres de negro -Real Madrid, Barça, UCAM Murcia, Lenovo Tenerife y Joventut, solo le falta el Gran Canaria-. Si se extiende el rango a los equipos con balances superiores al 50%, serían seis de nueve, uniéndose a la lista el Baxi Manresa. Salvo contra los azulgranas, todos estos enfrentamientos han sido a domicilio, ampliando aún más su dificultad, y en muchos la victoria no ha estado lejos, pero el botín sumado finalmente fue nulo. En los otros tres encuentros ante equipos de la zona baja, la escuadra de Mumbrú ha sumado dos victorias en casa ante Hereda San Pablo Burgos (balance de 3-6) y Urbas Fuenlabrada (2-7) y ha sufrido su mayor petardazo negativo hasta el momento: la contundente derrota en casa ante el Casademont Zaragoza (4-5).

Pese a todas estas circunstancias, la clasificación no se ha roto en sus últimas plazas y sigue habiendo siete conjuntos con un solo partido de diferencia. El Coosur Betis acompaña a fuenlabreños y bilbainos con el 2-7, con Obradoiro, Andorra y Unicaja con 3-6 al igual que los de Zan Tabak.

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Surne Bilbao Basket

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Los 'hombres de negro' se han medido ya contra seis de los nueve equipos con más victorias que derrotas, habiendo jugado fuera ante todos ellos menos el Barça

De los seis encuentros que restan en 2021, cuatro se disputarán en Miribilla: contra Obradoiro, Breogán, Gran Canaria y Unicaja