Ondrej Balvin calificó el lunes de “falsos” los rumores que apuntaban hacia él como protagonista de una posible salida del Bilbao Basket vía traspaso. Horas antes, desde Grecia se había especulado sobre la posibilidad de que Olympiacos se hubiese interesado por el pívot checo, actualmente inactivo por lesión, para apuntalar su juego interior. Balvin, cocapitán de los hombres de negro, utilizó sus redes sociales para descartar esa posibilidad y afirmó que “refiriéndome a todos los rumores de traspaso que tienen que ver con mi persona, quiero decir que son falsos. Soy firmemente un miembro del Bilbao Basket”.

La web totalbasket.gr señalaba el lunes mismo que Giorgos Bartzokas, técnico del conjunto heleno, consideraba que reforzar la posición de pívot era deseable para apuntalar sus opciones de clasificarse entre los ocho primeros en la temporada regular de la Euroliga y avanzar así a la siguiente fase y que con ese fin Olympiacos había puesto sus ojos en Balvin pese a encontrarse en el dique seco desde finales de noviembre tras dañarse su tobillo izquierdo jugando con su selección en las ventanas FIBA, provocándole un esguince moderado-severo con afectación de la sindesmosis tibioperonea distal y estableciéndose su periodo de baja hasta mediados del próximo mes aproximadamente.

El Bilbao Basket espera el regreso a las canchas de Balvin como agua de mayo, no en vano el pívot checo se ha convertido este curso, su segundo en la disciplina del conjunto vizcaino, en su gran pilar tanto defensivo como ofensivo y su ausencia se está dejando notar en la pintura del equipo vizcaino, endeble a más no poder en los últimos encuentros y terreno que explotan perfectamente los conjuntos rivales tanto mediante penetraciones de sus exteriores como con el juego uno contra uno de sus interiores. En los diez encuentros que pudo disputar en Liga Endesa hasta su lesión, promedió 12,9 puntos, 8,1 rebotes, líder en toda la competición, y 20,9 de valoración, solo superado por Giorgi Shermadini, pívot del Tenerife.