Bilbao - Para hacerse una idea de lo que está consiguiendo el Zornotza basta con quedarse con un dato que ofrece Joxe Etxebarria: Amorebieta-Etxano, con sus 17.000 habitantes, es la localidad más pequeña que se ha visto involucrada en un play-off de ascenso a la LEB Oro. “Todo el mundo en el pueblo está enterado de lo que estamos haciendo. Cada vez que me encuentro con alguien me da ánimos y me dice que hay que ganar”, comenta el presidente del club, que a veces se pregunta “si esto no se nos ha ido de las manos”.

Oportunidades como esta pasan una vez en la vida y el Zornotza se ha agarrado a ella, aunque ello haya supuesto tener que redoblar esfuerzos. “Hemos tenido que pedir colaboración a gente de fuera de la directiva porque si no es imposible. Yo soy la cara visible, pero esto no sería posible sin la ayuda de mucha gente que no sale en las fotos”, recuerda Etxebarria cuando el Zornotza vive un momento histórico. Larrea se quedó pequeño en los dos choques ante el Valladolid, entre otras cosas porque no hubo tiempo para instalar una grada supletoria y hubo que colocar muchas más sillas de las habituales para que cupieran todos los aficionados. Además, la directiva se ha tenido que ocupar de recoger las entradas para los partidos de Valladolid en la propia capital pucelana y repartirlas entre sus aficionados.

Porque detrás de todo lo bonito que en lo deportivo es un play-off hay unas obligaciones que hay que cumplir. El Zornotza es el tercero que disputa “y es el primero en que no vamos a perder dinero. Si conseguimos queda r a la par, estará muy bien”. Seis partidos más como local suponen unos ingresos añadidos considerables, pero también lo son los gastos. “Ha habido que hacer dos viajes a Granada. Aunque la plantilla es la más barata de la historia del club hay que pagar un mes más de sueldo y pisos de los jugadores, además de los arbitrajes , que también son más caros porque mandan un comisario”, explica el presidente del Zornotza. Con todo, Joxe Etxebarria siente que todo esto “está mereciendo la pena”, aunque también queda la sensación de que “tendrá un tope algún día, que no dará más de si. Porque tienes que pedir la colaboración de mucha gente y a veces piensas que no es justo”.

La competición no ha acabado aún y ahora tocan dos partidos en el Pisuerga y quizás otro más en casa el próximo martes: “Pase lo que pase, sentimos que el trabajo de esta temporada está hecho, y con creces, por parte de todos”. Pero para la directiva del Zornotza seguirá la tarea ya que habrá que seguir buscando dinero hasta debajo de las piedras para cuadrar las cuentas y estar preparado por si toca afrontar el ascenso. “Si ya subir a EBA y luego a LEB Plata nos pareció la leche, eso no sé lo que va a ser...”, admite Joxe Etxebarria. Pero cuando un pueblo está volcado...