bilbao - El proyecto del baloncesto femenino de Bizkaia echa a andar por segunda temporada consecutiva con la intención de seguir trabajando en la difícil tarea de aunar voluntades. “No podemos dejarlo abandonado a su suerte. Queremos asentarlo y que, efectivamente, sea un proyecto compartido”, destacó Germán Monge, presidente de la Federación Vizcaina, que junto a la Diputación Foral son los impulsores de una idea a la que debería quedarle mucho recorrido por delante, pero que necesita “de la generosidad y el compromiso de todos”.

4.098 licencias escolares y 1.881 federadas, que dan cuerpo a 308 y 139 equipos, respectivamente, merecen que aún se siga haciendo el esfuerzo porque, añadió Monge, “sin base es difícil que este proyecto tenga durabilidad”. Ese y no otro es el reto: conseguir que las jugadoras y sus familias vean que existe un conjunto de Bizkaia en la máxima categoría y lo sientan como suyo, como se siente el Bilbao Basket en el apartado masculino. Xabier Jon Davalillo apoyó con su presencia el proyecto y destacó que el esfuerzo por mantener una referencia es esencial para que la pirámide siga creciendo y que las jugadoras puedan vivir “un entorno profesional cerca de casa”, pero también lo es que “todos rememos en la misma dirección”, remachó Germán Monge.

Esta temporada los papeles están cambiados. El Gernika KESB jugará en la Liga Femenina como máximo representante en una competición de la que Bizkaia estuvo ausente durante 27 años. El momento económico quizás no es el más boyante para emprender aventuras ambiciosas, pero deportivamente el club foral se lo ha ganado a pulso y no es cuestión tampoco de desaprovechar estas oportunidades históricas. Por su parte, el Ibaizabal regresa a la Liga Femenina-2 después de una temporada en la que la ilusión del debut en la élite se topó con numerosos problemas que provocaron el descenso. Por suerte, el Gernika llegó por detrás para reconducir la situación y Bizkaia podrá seguir disfrutando del mejor baloncesto femenino.

“Vamos a intentar hacer una serie de actividades en paralelo para intentar que este sea un proyecto aglutinador, que todo el baloncesto femenino de Bizkaia se sienta identificado con él. Este el objetivo más importante de todos los que tenemos y sería a medio plazo”, reseñó Gerardo Candina, presidente del Gernika KESB al que le toca conducir los mejores momentos de la historia del club. “Creo que hemos hecho un equipo bonito, todas las jugadoras están con una ilusión terrible y hemos hecho una pretemporada que nos llena de ilusión. Queremos asegurar la permanencia y, si podemos, hacer un papel digno en la categoría”, añadió.

interesantes novedades En la presentación de ayer, destacó la presencia de las nuevas jugadoras de ambos equipos, de quienes destacan su buena integración. La rumana Claudia Pop, la inglesa Rachael Vanderwal, la croata Mirna Mazic y la estadounidense Bernice Mosby han reforzado de forma importante al Gernika Bizkaia, cargado de moral ante su debut de hoy en Donostia, y la danesa Bianca Morso y la estadounidense Ayesha Barkley son las novedades, junto a las vizcainas Esther Blanco y Jone Azkue, de un GDKO Bizkaia al que aún le quedan un par de semanas antes de empezar en Urreta la competición en el grupo A de la LF-2. Los medios y la ilusión están puestos. Ahora queda que el baloncesto femenino de élite consiga calar en Bizkaia más allá de Gernika y de Galdakao para que todo tenga el sentido que pretenden quienes están detrás.