Que Diego Pablo Simeone es un personaje que provoca animadversión entre la afición del Athletic es una realidad desde que el técnico del Atlético de Madrid se desenvolvía en el centro del campo. El histórico pisotón a Julen Guerrero abrió las hostilidades. Ahora, en lugar del técnico argentino, que pasó el pasado sábado por San Mamés y asistió desde la banda a la derrota de su equipo, observa cómo es su hijo Giuliano el protagonista. En esta ocasión, por los insultos que recibió en el estadio rojiblanco y que LaLiga ha denunciado ante el Comité de Competición de la RFEF y la Comisión Antiviolencia.
En el escrito se detalla lo siguiente: "En el minuto 45+1 de partido, un grupo de aficionados locales, ubicados en los sectores 105 al 110 de la tribuna norte baja, en la grada de animación y situados junto a dos pancartas con las inscripciones “Iñigo Cabacas” y “Herri Harmaila”, entonaron de forma coral y coordinada durante, aproximadamente, 10 segundos el cántico "Simeone, hijo de puta”, dirigido al jugador visitante Giuliano".
Denuncia por cánticos contra el Real Madrid
LaLiga, que la semana pasada también denunció al Athletic por cánticos contra el Real Madrid, Vinicius y Asencio, señala que "tras la detección del cántico y en diferentes momentos del partido, el club local emitió creatividades por videomarcadores de la consejería de Interior del Gobierno vasco referidas al fair-play y a favor del respeto y el juego limpio entre aficiones en las gradas".
"Se ha de destacar de manera especial que los hechos mencionados se han producido únicamente desde la zona descrita, manteniendo el resto de los aficionados locales presentes en el estadio un comportamiento adecuado", añade LaLiga.
