Andrés Iniesta, que este martes ha colgado las botas a los 40 años de edad, fue coleccionando aplausos por todos los campos por los que pasó desde que su gol en el Mundial de Sudáfrica dio el título a España. Bueno, en todos no. En San Mamés, tanto en la vieja Catedral, como en el nuevo estadio, el manchego tuvo que escuchar silbidos y un buen número de improperios y reproches. El fino centrocampista nunca conectó con la afición del Athletic. Una realidad que no ha impedido que desde Ibaigane reconozcan su trayectoria.
“Felicidades por tu larga y exitosa carrera como futbolista. Mucho fútbol en tus piernas. Suerte en esta nueva etapa que inicias tras colgar las botas”, ha destacado el Athletic en su cuenta oficial de X. Lo cortés no quita lo valiente. La trayectoria de Iniesta es para enmarcar, pero muchos athleticzales no olvidan algunos pasajes del ex del Barcelona cuando se ha cruzado en su camino la entidad bilbaina.
La animadversión de la grada de San Mamés con Andrés Iniesta empezó en la visita a Bilbao del Barça en la temporada 2010-11, poco después de que el manchego levantara la Copa del Mundo. Fernando Amorebieta fue expulsado con tarjeta roja directa por una dura entrada al centrocampista con los pies por delante. El público de la vieja Catedral entendió que el azulgrana, que saltó para evitar un mayor impacto, exageró y que eso fue lo que llevó a Mateu Lahoz a tomar la decisión de expulsar al central. Desde entonces todo fueron silbidos para Iniesta cada vez que compareció en la capital vizcaina.
Declaraciones sobre San Mamés
Tampoco ayudaron a templar los ánimos unas declaraciones del ‘8’, que al ser preguntado por el viejo San Mamés, dijo que para él era igual que jugar en cualquier otro campo. Ahora parece que Iniesta va a comenzar su carrera en los banquillos. Puede que en el futuro, quién sabe, se vuelva a cruzar en el camino del Athletic.