La estancia de Ander Herrera en el Athletic podría finalizar de inmediato. Pese a que la directiva de Jon Uriarte le trasladó semanas atrás una propuesta para continuar una campaña más vistiendo de rojiblanco, el jugador de 34 años sopesa hacer las maletas y recalar en el Zaragoza, donde se formó como futbolista, destino que valora como idóneo para colgar las botas, como ha expresado en ocasiones. Herrera no se ha pronunciado aún, pero empiezan a acumularse indicios que apuntan a que regresará a la capital aragonesa para integrarse en un proyecto que pretende el ascenso a la máxima categoría.

Los medios de comunicación radicados en Zaragoza llevan tiempo dándole vueltas al tema. Lo que al principio fue tratado como una mera opción sin excesiva verosimilitud, ha cobrado sentido en las últimas horas. Al parecer, Herrera habría solicitado información fidedigna en torno al plan de los dirigentes de la entidad aragonesa para saber a qué atenerse. Ahora conoce de primera mano que el club se ha puesto manos a la obra a fin de diseñar una plantilla competitiva que le permita volver a la élite, donde no figura desde 2013.

El Zaragoza ha tomado la decisión de fichar a Herrera, movimiento avalado por Víctor Fernández, el entrenador que se mantiene en el cargo, y Juan Carlos Cordero, director deportivo. Un consenso refrendado por los propietarios de la entidad aragonesa. Todas las partes citadas se reunieron el lunes en Madrid a fin de perfilar las líneas maestras de un Zaragoza con capacidad real de subir la próxima temporada.

Herrera ya ha sido informado de los pormenores de una ambiciosa iniciativa que le reserva el papel de líder. Además, sus agentes han recibido los pormenores del contrato, que presumiblemente sería de un año, con un segundo opcional de alcanzar el objetivo. Solo falta pues que el protagonista confirme el cambio de aires.

La respuesta no debe demorarse, toda vez que el propio Herrera ha estado presionando al Zaragoza para que cumpla con su parte y poder cerrar un acuerdo. El jugador se marcaba la presente semana como plazo tope para decantarse en uno u otro sentido. De consumarse su salida hacia la ciudad en que se ha construido una casa (en Bilbao vive de alquiler), porque es allí donde siempre ha manifestado que viviría al finalizar su carrera futbolística, dejaría al Athletic en una situación bastante incómoda, por no decir desairada.

Más allá de lo que significaría su baja en el ámbito deportivo, aspecto abierto a toda clase de valoraciones, hay que considerar que el gran interesado en que Herrera siguiese era Ernesto Valverde. Aunque en dos campañas haya ejercido de suplente y no solo a causa de su precaria disponibilidad física, el técnico le quería en sus filas. Ello explicaría que, aunque Herrera barajase la opción del Zaragoza como prioritaria, el club hubiese transigido con ser segundo plato en esta historia.

El Athletic era consciente de que Herrera atendería su oferta después de sopesar si prefería recalar en La Romareda, y lo tenía asumido. O sea, que le parecía normal que el jugador antepusiese bajar de nivel a completar una temporada con el extra de la Europa League y la Supercopa. Se quede o se vaya, tal ha sido el dilema gestionado por Herrera. Con absoluta legitimidad, claro, pero a costa de subestimar al Athletic. Pero el asunto encierra otra derivada que, sea cual sea el desenlace, no deja en buen lugar al Athletic. Conviene recordar que a Dani García se le comunicó que esperase para resolver su futuro. La espera estaba condicionada a la decisión de Herrera. O sea: si este se iba, él podía tener hueco en la plantilla del año que viene. Dado que Herrera se estaba demorando en exceso, Dani García consideró que la situación alentada por el Athletic no era de recibo y anunció su marcha.

Es probable que en breve se formalice el fichaje del centrocampista guipuzcoano por Olympiacos, a petición expresa de Mendilibar. El escaso tacto demostrado por el club hacia la persona de Dani García, no es sino una consecuencia más del trato de favor de que ha gozado Herrera desde que aterrizase procedente del Paris Saint-Germain.

Al final, puede suceder que el peor parado de todo este enredo sea el Athletic, víctima de su extraña manera de funcionar. Incluso si a última hora Herrera renunciase a irse al Zaragoza, el club se ha puesto en evidencia. En la hipótesis opuesta, tiene ante sí un problema importante en la línea de medios, con tan solo tres piezas contrastadas (Galarreta, Prados y Vesga) y un par de meritorios por detrás para negociar un calendario particularmente duro.

Área técnica

El Athletic quiere a Etxeita

Organigrama de Lezama. Mikel González ha contactado con Xabier Etxeita para ofrecerle un puesto en el staff técnico de Lezama. El que hasta el domingo pasado era central del Amorebieta y exjugador del equipo rojiblanco, entre otros, es pretendido por el equipo rojiblanco para ocupar un puesto dentro del organigrama de la factoría del Athletic, según ha podido saber Onda Vasca. Etxeita, con un amplio currículum como futbolista, también entra en las quinielas del Amorebieta como sustituto de Asier Goiria. Curiosamente este movimiento del Athletic chocaría con las intenciones de los azules, ya que tras la marcha de Goiria era un pieza que podía encajar perfectamente. El futbolista de Zornotza no ha tomado aún ninguna decisión sobre su futuro, ya que las conversaciones se están produciendo en estos días. En cualquier caso son opciones que se barajan pero cualquier escenario es posible. En su día ya se apartó del fútbol, aunque solo fueron un par de meses, para regresar posteriormente al club de su localidad, el Amorebieta, donde ha colgado las botas.