El Athletic, imponente en su visita al Ramón Sánchez Pizjuán, se adjudicó la tercera victoria consecutiva en liga para enlazar nueve jornadas sin perder y espantar las dudas generadas por la marcha de Iñaki Williams a la Copa África con Ghana. Se esperaba con una mezcla de expectación y temor los efectos negativos que podía acarrear la sensible baja del bilbaino en el engranaje ofensivo del equipo y la respuesta del colectivo, incluido el cuarteto de arriba con la entrada de Alex Berenguer, estuvo a la altura. Por partida doble golpearon los rojiblancos y con la novena portería a cero del curso en liga cerró el choque Unai Simón, perfectamente escoltado por una pareja de centrales en la que destacó esta vez Aitor Paredes.

El de Arrigorriaga, a sus 23 años y en su segunda temporada como león, no solo estuvo firme y expeditivo en labores defensivas, sino que se estrenó como goleador con el primer equipo del Athletic siguiendo el ejemplo de otros cuatro compañeros de vestuario esta campaña. Antes, no en vano, lo hicieron Unai Gómez, Dani García, Ruiz de Galarreta y Adu Ares, quien firmó un doblete en Copa ante el Rubí. Hasta cinco jugadores, así las cosas, han inaugurado su cuenta realizadora como rojiblancos esta temporada, en la que Paredes va camino de asentarse en la máxima categoría para satisfacción propia y de Ernesto Valverde.

En la figura del central bilbaino, no en vano, ha encontrado el técnico un salvavidas dada la delicada situación del equipo en el centro de la zaga tras la marcha de Iñigo Martínez al Barcelona y la sucesión de problemas físicos de Yeray Álvarez. De figurar como el cuarto central de la plantilla el pasado ejercicio a ejercer como titular habitual junto a Vivian ha pasado prácticamente en un abrir y cerrar de ojos Paredes, que suma 36 partidos como león con un rendimiento al alza. Atrás quedan algunas dudas y críticas vertidas en el tramo inicial del curso, cuando la acumulación de goles en contra puso en la diana al de Arrigorriaga, que acumula ocho jornadas consecutivas al borde de la suspensión al asomar con cuatro tarjetas amarillas.

Sólido en la marca y cada vez más seguro, Paredes se ha ganado definitivamente la confianza de Valverde, quien aseguró al término del envite de anoche que “si Paredes ha sido censurado, lo habrá sido fuera, porque dentro no. Sabemos la valía que tiene, hay que tener en cuenta que el año pasado también tuvo que jugar partidos comprometidos al final de temporada cuando no estaban ni Iñigo Martínez ni Yeray y que hace apenas año y medio estaba jugando en Primera RFEF. Los jugadores no se hacen de pronto, tienen que tener un recorrido para poder hacerse y el fútbol no es el mejor de los sitios para hablar de paciencia. “Paredes es un buen jugador, un gran jugador y de Primera División. No tengo ya ninguna duda y antes tampoco la tenía de que lo iba a ser”, prosiguió Valverde, quien destacó que “el gol es un premio a lo que hace, porque siempre está rondando el gol en jugadas de estrategia y lo ha conseguido”.

UN ORGULLO

Paredes, por su parte, reconoció en la zona mixta del Sánchez Pizjuán que buscaba con ahínco su primer gol como león. “En la primera parte rematé otra arriba y ya estaba pensando a ver cuándo iba a llegar. Se lo dedico a toda la gente que me apoya, a mi familia y a mis amigos”, indicó el bilbaino, que subrayó su “orgullo” por estrenarse como goleador y admitió que “pasar de Primera RFEF a Primera División no es fácil y necesitas un tiempo de adaptación, pero por suerte he podido ver muchos partidos en el banquillo aprendiendo de Yeray, Vivian e Iñigo y cada vez voy a mejor y sintiéndome más cómodo”.