Dicen que una imagen vale más que mil palabras. Los rostros desencajados de los futbolistas y los pitidos que se dejaron oír desde la grada, los primeros que recibe Marcelino en su periplo en Bilbao, han delatado el esperpento que ha ofrecido el Athletic en un compromiso en el que debía ratificar su hipotética candidatura a una plaza europea que cada ve está más lejana, por no decir que se limita ya a una quimera. Las matemáticas no la descartan, pero las sensaciones dicen lo contrario. El Athletic ha proyectado una versión menor y ha estado a merced de un Celta que ha jugado a lo que ha querido para dejar sentenciado el partido en el primer periodo gracias a los tantos de Iago Aspas y de Fran Beltrán, un brutal impacto que ha pillado al personal con el pie cambiado. El Celta, que solo había sumado un punto en las cuatro jornadas anteriores y que ya ha dicho todo lo que tenía que decir en esta liga, ha sacado sin más los colores a un Athletic desconocido y, de paso, ha dejado en mal lugar a Marcelino, que prácticamente se ha equivocado en todas sus decisiones y que no ha sabido responder a lo que requería un encuentro que puede abocar al conjunto rojiblanco a unas vacaciones anticipadas.

El 23 de abril es una fecha que debía marcar al Athletic. En primera instancia la tenía subrayada en rojo hace un par de meses en su deseo de disputar en La Cartuja su tercera final de Copa consecutiva, pero su fiasco en la semifinal ante el Valencia lo frustró. Como segundo plato, quiere que el Betis conquiste el título, que habilita la séptima plaza que da billete a la Conferencia League. Se entendía que ese es el objetivo que le quedaba a este Athletic, que quizá lo haya tirado a la basura tras su dolorosa derrota frente al Celta en un partido en el que ha sorprendido la presencia de Alex Petxarroman en el once inicial en detrimento de Óscar de Marcos, precisamente pocos días después de que el segundo capitán desvelara que renovará por una campaña más. Sea como fuere, se trata de la primera titularidad del donostiarra en liga cuando, paradójicamente, su mejor versión la sacó en la jornada anterior en el Estadio de La Cerámica como centrocampista. Ataques de entrenador. La exigencia ponía a prueba a Petxarroman, que tenía por delante a Alex Berenguer, una sociedad inédita, de matiz más ofensivo que defensivo. Marcelino resbaló con alevosia en un plan en el que volvió a insistir por sexta jornada consecutiva con Unai Vencedor y Mikel Vesga en la medular supuestamente a la espera de un Dani García mermado por sus molestias de pubis.

Ha emergido en el peor momento el Athletic más pobre en San Mamés de los últimos tiempos. Ver para creer. Todo lo que había dicho el entrenador en la víspera se ha quedado en mera palabrería. Que si San Mamés debe ser un fortín, que si este equipo genera mucho y los puntos son escasos para sus méritos... Vamos, lo que quiere ser un regalo para los oídos autocomplacientes. Otra cosa es la exigencia o ambición, que son deciden y dibujan a un conjunto que tiene hambre. Y los 45 minutos iniciales del colectivo rojiblanco han retratado, en cambio, una vulgaridad impropia de un equipo que vende su anhelo de competir en Europa el próximo curso y el desatino de un Marcelino que se ha hecho el harakiri en la pizarra. Mejor dicho, el Chacho Coudet se lo ha comido en la idea táctica. Porque el Celta ha gestionado el juego hasta el descanso a su antojo y solo se ha visto inquietado en una decena de minutos en los que el Athletic ha sacado un atisbo de sus virtudes. Poca cosa. Iago Aspas, un viejo rockero y al que no se le olvida el olfato del gol, ha adelantado al cuadro celeste en un enésimo desajuste defensivo de los leones, que encadenan siete jornadas consecutivas encajando. Un mal despeje de Yeray, un mal repliegue y un buen centro de Brais Méndez que ha ejecutado el de Moaña. Cuando se alinean los planetas ocurre esto.

El Athletic, mientras, ha discutido con su fútbol, desnortado en todos sus conceptos. Yuri Berchiche ha sido una pesadilla para su equipo, Petxarroman no ha dado nivel, la pareja en la medular sin capacidad de generar, las bandas desactivadas y una colección de defectos a los que ni siquiera le ha salvado el espejismo que han aportado los remates de Berenguer y de Oihan Sancet por partida doble. Un autoengaño, sencillamente. El Athletic no carburaba y para un equipo que no presume de una pegada descomunal que le pueda sacar del apuro en momentos delicados de juego la penalización es aún más lesiva. Y así ha sido, cuando Fran Beltrán se ha sacado un derechazo con parábola, tras una decision errónea de Petxarroman en su defensa de Javi Galán, que ha sorprendio a Unai Simón, que quizá haya podido hacer algo más. Erre que erre. Una segunda bofetada que dejaba a los leones al borde del K.O.

DE MAL EN PEOR

El encuentro se ponía feo para los intereses del Athletic y si no quieres taza, toma taza y media. Marcelino ha continuado con sus ataques de entrenador y ha regresado a vuelta de vestuarios con una triple sustitución. Cambiar por cambiar, visto lo visto. Ha prescindido de su pareja ofensiva para reubicar arriba a Berenguer con Villalibre, ha querido más toque con Zarraga y algo de frescura con la comparecencia de un desconocido Nico Wiliams, al que no le ha salido nada. Un nuevo plan que también ha descarrilado. No solo eso, sino que el Athletic ha ido de mal en peor, lo que ha desesperado a su parroquia, incrédula ante el despropósito que presenciaba. Tanto que el segundo acto se ha convertido en un suplicio para el Athletic, que ha tenido que esperar al minuto 89 para poner a prueba a Dituro e incapaz de hacer ni siquiera cosquillas a un Celta ojiplático por la sesión de spa de la que disfrutaba. Para más inri, Villalibre ha sufrido su enésima lesión. Como para autoflagelarse.

FICHA TÉCNICA

ATHLETIC: Unai Simón; Petxarroman, Vivian, Yeray, Berchiche; Berenguer, Vencedor, Vesga (Min. 46, Zarraga), Muniain (Min. 68, Raúl García); Sancet (Min. 46, Nico Williams) e Iñaki Williams (Min. 46, Villalibre) (Min. 72, Nico Serrano).

CELTA: Dituro; Kevin (Min. 72, Murillo), Araújo, Aidoo (Min. 91, Domínguez), Javi Galán; Brais Méndez, Denis Suárez (Min. 88, Solari), Fran Beltrán, Cervi (Min. 73, Tapia); Santi Mina (Min. 72, Nolito) e Iago Aspas.

Goles: 0-1: Min. 11; Iago Aspas. 0-2: Min. 37; Fran Beltrán.

Árbitro: Hernández Hernández (Comité Las Palmas). Amonestó a Petxarroman (Min. 41) y Muniain (Min. 62), por el Athletic; y a Kevin (Min. 52) y Tapia (Min. 93), por el Celta.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la trigésimo segunda jornada de LaLiga Santander disputado en San Mamés ante 35.541 espectadores, según datos oficiales.