El Athletic ha comunicado este jueves que un número de socios que representa al menos el 5% de la entidad, tal y como requiere el artículo número 22 de los Estatutos, ha solicitado convocar una Asamblea General Extraordinaria para someter a votación una propuesta de Grada Popular en La Catedral “que unifique las zonas actuales de animación y dé solución a la demanda existente de jóvenes abonados”. La iniciativa denominada San Mamesen Orroa entregó el pasado lunes en la sede del club las firmas necesarias.

Examinados los avales remitidos a Ibaigane, 2.416 han resultado válidos y superado ese 5% de la masa social, por lo que la Junta Directiva deberá convocar al máximo órgano de la institución dentro de los treinta días siguientes a la fecha del requerimiento notarial para esta convocatoria. El día, lugar y hora de esta reunión de socios compromisarios se comunicará en próximas fechas, según indicó la entidad bilbaina.

GRADA POPULAR

El proyecto de la Grada de Animación, ahora denominada Popular y que se ubicaría en la Tribuna Norte Baja, es una de las propuestas electorales estrella con las que Aitor ElizegiEl presidente, que está a poco más de tres meses de dejar el cargo, ha asegurado durante todo su mandato que su puesta en marcha es vital para modernizar el coliseo rojiblanco. Lo ha considerado “un proyecto estratégico”. Algo que repitió en la última entrevista concedida a este periódico: “Ese es uno de mis grandes objetivos en la vida, esté en Ibaigane o en la grada. Cada día es un acuerdo entre athleticzales, entre socios que queremos ver de una manera y de otra al Athletic. La mayoría entendemos San Mamés en esa dirección, hay que ser capaces de ser hacer esta transición y esta grada con el acuerdo de todos y con el máximo de confort para todos”.

RECHAZADO POR NUEVE VOTOS

La Asamblea le echó para atrás a Elizegi a finales de 2020 de forma ajustada (339 votos a favor, 348 en contra y 41 abstenciones) el proyecto de la Grada de Animación. Su idea era crear un espacio único para cerca de 2.200 aficionados. Esto afectaría a unos 2.500 socios durante la remodelación, uniendo en las catorce primeras filas a los actuales sectores 110 y 124, así como a los Gazte Abonoak mediante una obra cuyo coste estaba cuantificado en unos 3,5 millones de euros.

Año y medio después, cuesta imaginar, después de la dificultad que Elizegi y su Junta han tenido para superar las asambleas durante su mandato, que a las puertas de salir de Ibaigane y con el clima preelectoral que en próximas fechas subirá de intensidad, que los compromisarios apoyen su proyecto más personal. Está por ver también qué pasa con el proyecto de reforma de los Estatutos.