Después de la derrota sufrida el domingo en la final de la Supercopa frente al Real Madrid, el Athletic afrontará este jueves un nuevo partido de mucho nivel. El Barcelona visita San Mamés con el pase a los cuartos de final de la Copa en juego. Será, después de un año en el cargo, el primer gran encuentro que Marcelino García Toral dirigirá como local en el torneo del K.O. con público en las gradas. Al respecto, en su comparecencia de este miércoles ante los medios de comunicación, el técnico asturiano ha desvelado lo siguiente: "Me dicen que voy a vivir un gran partido de Copa en San Mamés".

Buena parte de la rueda de prensa ha girado en torno a lo acontecido el domingo en Arabia Saudí. Marcelino se ha defendido, ha sacado las uñas y ha dejado una frase de calado. "En mi opinión, en el fútbol actual que el Athletic, con su filosofía, llegue a finales es un éxito que está al mismo nivel o por encima de cualquier título que puedan ganar el Barcelona, el Real Madrid o Atlético de Madrid".

En este sentido ha asegurado que lo logrado por sus futbolistas es motivo más que suficiente para que "la afición esté orgullosa" del equipo. Preguntado sobre si hay amargura dentro del vestuario tras la derrota en la final, ha asegurado que no. "¿Amargura? Será tristeza. Siempre que pierdes una final estás triste, porque ves tan cerca ganar un título que te produce una tristeza enrome. Pero a la vez nos supone un orgullo enorme, tremendo. Es una decepción, no un fracaso".

De vuelta al encuentro de este jueves, Marcelino ha apuntado que un partido de ida y vuelta, como el que se pudo ver el miércoles de la semana pasada entre el Barcelona y el Real Madrid no le conviene a su equipo. "Esas idas y vueltas contra equipos grandes no nos convienen", ha asegurado. "No vamos a cambiar mucho nuestra idea de juego. Venimos practicando lo mismo toda la temporada. Y contra el Barça vamos a hacer lo mismo".

El técnico asturiano ha detallado las diferencias que ve entre el actual Barcelona que dirige Xavi Hernández y el que hasta hace unos pocos meses entraba Ronald Koeman y que logró un empate a uno en San Mamés en la segunda jornada de liga. "El Barça, con Xavi, tiene automatismos diferentes y más ritmo de juego. Han recuperado a muchos futbolistas que creo que son los más determinantes y les pueden dar un plus. Es un equipo que presiona alto y que se repliega rápido. Intentan tener la posesión, pero no con ataques tan seguidos y utiliza también el contraataque. Es un Barça con posesión de balón, pero creo que adaptado al fútbol actual".

OPTIMISTA

Marcelino no ha querido perder ni un solo minuto en pensar que su equipo no puede pasar este jueves y estar presente en el sorteo de Copa que se realizará el viernes al mediodía. "No soy pesimista. Y como no lo soy, no estoy pensando en perder. No me pongo nunca en ese planteamiento, juguemos contra quien juguemos. Ahora tengo la idea de buscar la forma de ganar. Para el entrenador es más sencillo. Plasma, visualiza y transmite. El jugador ejecuta y eso es más difícil de transmitir".

De cara al partido, el técnico ha avanzado que habrá cambios, aunque sin concretar el número ni en qué demarcaciones. "Cambios va a haber algunos. El equipo necesita refresco. Ante el Real Madrid algunos acusaron el esfuerzo. Luego tuvimos un viaje de vuelta largo y a los pocos días volvemos a jugar ante un gran equipo, con lo que te exige. Algunos cambios haremos". Entre las posibles novedades en el once podrían estar los nombres de Yuri Berchiche, Iñigo Lekue o Nico Williams.

Menos pistas aún ha dado con respecto al portero que jugará el jueves. "Fifty-fifty", ha asegurado Marcelino al referirse a las opciones que tienen Unai Simón y Julen Agirrezabala por vestirse de corto, toda vez que Jokin Ezkieta no computa. Eso sí, ha dejado claro que ya tiene la decisión tomada. En este sentido, cabe recordar que en el encuentro de los dieciseisavos de final de Copa frente al Atlético Mancha Real el elegido fue Agirrezabala, decisión que ya avanzó semanas atrás el técnico, aunque en aquella ocasión Simón no se desplazó a tierras jienenses.