El presente sonríe a Oier Zarraga (Getxo, 4 -I-1999), a pleno rendimiento para hincar el diente a una temporada en la que busca reivindicarse como jugador del primer equipo del Athletic. Atrás ha quedado la lesión de menisco que sufrió en marzo y que le obligó a pasar por el quirófano echando así el freno a su primera campaña como león.

Con cinco partidos a sus espaldas en LaLiga tras debutar en la sexta jornada del pasado curso ante el Levante en un vacío San Mamés, cuando salió desde el banquillo en el minuto 70 en sustitución de Unai López, el destino ha querido que sea precisamente el lugar del centrocampista donostiarra el que pase a ocupar un joven futbolista que, no obstante, no se siente el recambio de nadie. Así lo aseguró en su primera rueda en Lezama, en la que se mostró sereno, reflexivo y afirmó que "no creo que esté sustituyendo a nadie; son decisiones que toma el club y yo voy a seguir haciendo mi trabajo y siendo yo mismo sin compararme con nadie".

A título individual, por otra parte, Zarraga apunta que "es mi decimotercer año en el club y nunca había tenido un parón tan largo por lesión. Estoy contento por sentirme bien de nuevo, ver que la rodilla no me da ningún problema e ir cogiendo minutos y buenas sensaciones". "En principio eran cuatro meses de baja desde que me operaron, pero no tuve ningún problema después, se fueron cumpliendo los plazos y en los quince o veinte días que habíamos adelantado me probé y la rodilla respondió bien", relató asimismo el getxotarra, quien se ofrece a Marcelino García Toral para ser de la partida en Elche, toda vez que "en cuanto a ritmo de juego igual me falta un poco, pero físicamente estoy a la par de los demás y estoy preparado si el míster cuenta conmigo".

"Durante la pretemporada no me he sentido examinado en ningún momento. Ser futbolista es esto, que te vean de lo que eres capaz para después tomar decisiones. Mi auto exigencia es muy alta y haré lo que me pida el míster", incidió un centrocampista dinámico por naturaleza que no tiene reparos en reconocer que Marcelino "insiste mucho con los jugadores de dentro en que juguemos a un ritmo alto, miremos hacia delante y seamos valientes". "Si hay una pérdida de balón, por ejemplo, quiere que presionemos arriba, jugar a dos toques y en diagonal", agregó el vizcaino, quien cuestionado por el perfil de compañero en la medular con el que más cómodo se siente dijo no tener "ninguna preferencia". "Podemos asociarnos, corregirnos entre nosotros y con quien comparta centro del campo sé que voy a estar cómodo, ya sea con un perfil parecido o diferente al mío", aseguró un sobrio Zarraga, quien confesó estar "en ese periodo de adaptación a la élite, pero no tengo ningún problema para ser yo mismo en el campo".

"Puedo parecer un poco reservado o tímido, pero no tengo inconveniente en tirar hacia delante o lo que sea", reivindicó, no en vano, el de Getxo, quien lanzó en términos colectivos que "después de esta pretemporada que hemos hecho, con buenas sensaciones, intentaremos seguir en la misma dinámica y empezar bien LaLiga sumando los tres puntos en Elche ante un rival que sabemos que será duro".

SU ESPEJO

En cuanto al espejo en el que se fija y los futbolistas que tiene en consideración a la hora de intentar mejorar sus prestaciones en el campo, Zarraga admite que "me fijo, sobre todo, en jugadores dinámicos que se mueven mucho y piden mucho el balón. Al no tener yo un perfil defensivo tan trabajador me fijo mucho en esos jugadores para aprender y poder hacer lo mismo en un futuro". "Empecé jugando aquí como lateral derecho en alevines y seguí ahí hasta juveniles, así que creo que podré ayudar al míster donde decida ponerme", entiende además el rojiblanco, que hizo hincapié ante los medios de comunicación en que "quiero entrenar lo mejor posible, hacer lo que me pida el cuerpo técnico y ojalá estar en el once desde el principio".

Con tamaña ambición encara el comienzo del ejercicio entrante Zarraga, una apuesta firme por parte del club para un centro del campo que debe dar un paso al frente a partir del lunes en beneficio del colectivo. "Confiamos mucho en nosotros, somos muy ambiciosos, va a ir todo bien y seguro que vamos a pelear por Europa", defiende el getxotarra, ansioso por disputar su primer partido como león con público en San Mamés, pues "cada vez que vamos a un estadio y lo vemos lleno como en Anfield comentamos las ganas que tenemos de tener a nuestra gente con nosotros".