APOSTAR por el Athletic no fue sencillo para ellos. Adoptar un cambio siempre exige un posterior periodo de adaptación. Pero si encima ese cambio significa mudarse al vestuario del acérrimo rival, todo es aún más complicado. Echando la mirada al retrovisor surgen los reproches, la incomprensión; por delante asaltan las dudas de quienes cuestionan el amor por unos colores, y luego llega el momento de tener que demostrar sobre el terreno de juego que la implicación no es cuestión de un lugar de nacimiento o de hábitat formativo. No se puede enamorar a todos. El futbolista, que al fin y al cabo persigue su bienestar, debe aprender a convivir con el reproche ajeno. Es el peaje que uno paga por cambiar de bando. Es el precio de una rivalidad que da cabida a fuertes sentimientos y emociones.

Pero todos ellos dejaron tiempo atrás el momento del cambio. Ahora disfrutan vestidos por unos colores que no son los mismos que les vieron forjarse como futbolistas. Militan en el Athletic. O cuanto menos, Zubieta fue un lugar de paso a nivel formativo. Para ellos, la final de Copa del próximo 3 de abril será un duelo especialmente emotivo, porque escucharán los ecos del pasado mientras tratan de hacer historia en presente. Iñigo Martínez (Ondarroa, 1991), Yuri Berchiche (Zarautz, 1991), Mikel Balenziaga (Zumarraga, 1988), Dani García (Zumarraga, 1990) y Unai López (Errenteria, 1995) podrán conquistar un título con el Athletic y a la vez arrebatárselo a la Real, allí donde se acunaron futbolísticamente.

Desmitificando lo que se pudiera creer, todos ellos recibieron una grata acogida en Bilbao, tal y como han ido verificando. Ahora son futbolistas plenamente identificados con el Athletic. De los cinco, el que más tiempo lleva en Lezama es Balenziaga, con diez temporadas, 275 partidos y 2 goles como león. Recaló en las filas bilbainas sin haber debutado con el primer equipo de la Real, lo cual hizo que no se generase tanto ruido como con la incorporación de Iñigo Martínez. En 2008, un millón de euros y el beneplácito de Joaquín Caparrós le hicieron desembarcar en el Athletic, donde pronto se ganó el puesto en el lateral izquierdo, en detrimento de Koikili Lertxundi y de Javi Casas. Desde entonces, fue asiduo a la titularidad, hasta que llegó Yuri Berchiche, otro con pasado txuri-urdin.

la referencia de Balenziaga

La acogida de Balenziaga, que siempre sirve de referencia para posteriores incorporaciones procedentes de las filas enemigas, pudo motivar a otros a seguir sus pasos. Uno de ellos fue Unai López, que, al igual que Balenziaga o Iñigo, llegó al Athletic directamente desde la Real, como no fueron los casos de Yuri y de Dani García, estos últimos menos sujetos a la crítica. Unai se formó en la prolífica cantera del Antiguoko, al igual que Yuri. Desde el caladero txuri-urdin recaló en la Real, donde solo permaneció una campaña, la 2010-11, que la pasó inmerso en la Liga Vasca Cadete, donde coincidió con Guridi, Bautista, Sangalli u Odriozola. Su irrupción le hizo recibir la llamada de la selección estatal y también la del Athletic, que lo reclutó en 2012. En Bilbao debutó en Primera a los 18 años, de la mano de Ernesto Valverde. Si bien, posteriormente fue cedido a Leganés y Rayo Vallecano para luego regresar al Botxo y ganar la trascendencia que ahora atesora. El centrocampista acumula 4 campañas, 82 compromisos y 4 tantos.

Berchiche se transformó en un peso pesado del vestuario nada más llegar a Bilbao, como lo son actualmente los otros cuatro leones con pasado en la Real. El lateral zurdo pasó por la cantera de la Real en 2004, para fichar por el Athletic un año después. Yuri no cuajó entonces y emigró con la carta de libertad al Tottenham, donde no llegó a tener minutos con el primer equipo, y fue cedido primero al Cheltenham y después al Valladolid. Al finalizar su contrato con los Spurs se marchó al Real Unión, desde donde le pescó de nuevo la Real. Corría el año 2012. De nuevo, Yuri no terminó de asentarse y fue prestado al Eibar para ser repescado en 2014. Esta vez sí, el zarauztarra brilló en Anoeta y sedujo al PSG, donde a pesar de ser el lateral zurdo con más minutos de juego, fue traspasado al Athletic, que desembolsó unos 20 millones de euros para convertirse en el segundo fichaje más caro de la historia del club bilbaino, solo superado por Iñigo Martínez. En 3 temporadas ha disputado 102 partidos y cuenta con 8 goles.

Iñigo y el otro lado de la a-8

El caso de Iñigo es el que más polvareda levantó de los aquí citados. El central, capitán de la Real, donde permanecía desde los 15 años, llegó a decir que no se marcharía “al otro bando”. Finalmente decidió viajar al otro lado de la A-8 tras abonar el Athletic su cláusula de rescisión, de 32 millones. En Gipuzkoa se imprimieron billetes con su rostro y la Real llegó a canjear las camisetas vendidas con el nombre y dorsal de Iñigo por unas nuevas. El de Ondarroa, en cuatro temporadas y tras 116 encuentros disputados y 2 goles anotados, es actualmente el bastión de la defensa rojiblanca e internacional para Luis Enrique. Su rendimiento no ha dejado lugar a las dudas en ningún momento. La implicación se percibió desde el primer instante. Fue a Bilbao a por títulos y ya tiene uno, y ahora contempla la ocasión de levantar otros dos.

Dani García y Yuri son los dos últimos casos de exjugadores de la Real que han recalado en el Athletic. Al igual que el lateral izquierdo, el centrocampista se hizo fijo en el oncea. De ahí que en 3 temporadas acumule 100 partidos. El zumarragarra llegó a la Real en 2007, en edad juvenil. Una vez finalizada la edad para esta categoría, se marchó a los filiales de Alicante y posteriormente Getafe, para en 2012 retornar a la Real. De nuevo afincado en Zubieta, alternó cesiones y estancias entre el club txuri-urdin y el Eibar, hasta que expiró la propiedad de la Real sobre el jugador y Dani recaló con la carta de libertad en el Eibar, como sucedería con su llegada al Athletic, que se produjo a coste cero. En Bilbao, además de fútbol, Dani encontró el grupo musical Orsai que lo conforma junto a otro puñado de leones, siendo Balenziaga uno de ellos. Fe del buen rollo.

Todos ellos tendrán la oportunidad el próximo 3 de abril de engrandecer al Athletic a costa de la Real Sociedad. No habrá cuestiones de venganza o rencor, sino asuntos de profesionalidad. Sus actuaciones y las de sus compañeros les han conducido a esta cita especial, en donde resonarán ecos del pasado.

La implicación y el sentimiento de identificación son características de estos cinco futbolistas desde su llegada a Bilbao

Los cinco exjugadores de la Real que actualmente militan en el Athletic son hoy en día grandes pesos del vestuario bilbaino