Bilbao - Quedan poco más de dos semanas para que Aitor Elizegi y su Junta Directiva se enfrenten al primer juicio de los socios compromisarios. Diez meses después de ganar las elecciones a la presidencia, el sustituto de Josu Urrutia como máximo responsable del club, debuta en una Asamblea General Ordinaria. Será el próximo día 20, en una jornada dominical que empezará a primera hora acabará con el Athletic-Valladolid en San Mamés como postre. El presidente rojiblanco confía en que la cita en el palacio Euskalduna acabe con un respaldo amplio a las cuentas que va a presentar. Quizá el ruido venga con la propuesta para reformar los estatutos o con los ruegos y preguntas. En Ibaigane ya tienen cerrados todos los números, que prevén un presupuesto para el curso 2019-20 que asciende a 132.746.00 euros. Por enésimo año, serán unas cifras significativas las que maneje la entidad bilbaina, que aumenta en poco menos de 4 millones el presupuesto respecto al curso anterior (128.923.00).
Asentado en la parte alta del ránking de los equipos que más dinero manejan de LaLiga Santander, lejos, eso sí, del respaldo financiero que presentan el Barcelona, el Real Madrid o el Atlético, el Athletic únicamente prevé un superávit para este curso de unos 126.000 euros, con la televisión como principal sustento. Sin ingresos por participar en competiciones europeas, los gestores de Ibaigane son conscientes de la imposibilidad de aumentar los ingresos en las arcas del club. En la temporada 2018-19, los ingresos previstos fueron de 189 millones, que finalmente ascendieron a poco más de 216. Los gastos, fijados en 128 millones, superaron los 192.
De nuevo, como viene siendo la tónica habitual desde hace años, buena parte del presupuesto del año va destinado a pagar los sueldos de los futbolistas y del cuerpo técnico. Una cantidad que asciende a 84 millones de euros, similar al de la temporada anterior. Lo que supone algo más del 60% de los ingresos previstos por la Junta de Aitor Elizegi.
En la Asamblea del año pasado, la última de Urrutia, el 78% de los socios compromisarios respaldó el balance de las cuentas y un superávit de 76 millones de euros que fue destinado a provisiones extraordinarias con el fin de reforzar la institución en caso de que vinieran mal dadas.
A la espera de que los gestores de Ibaigane detallen la letra pequeña de las cuentas en la Asamblea, está por ver si la problemática sobre la grada de animación cobra carta de naturaleza. Los socios críticos con los planes de Elizegi están recogiendo las firmas necesarias para debatir sobre el tema en el cónclave del Euskalduna. - DEIA
