santander - Una mesa de trabajo, un ordenador y algunos papeles, poco más, conforman el despacho de Ángel Viadero en La Albericia, el cuartel general del Racing de Santander, un histórico venido a menos. El técnico ha estudiado minuciosamente al Athletic, rival mañana del conjunto cántabro en Copa, como así atestiguan muchos de los apuntes que, bien ordenados, recoge el técnico de su mesa.

¿Afrontan el partido de alguna manera especial por tratarse de la Copa y tener a un rival como el Athletic enfrente?

-Siendo el trabajo el mismo, porque al final no deja de ser un partido, hablamos de un encuentro especial. Vamos a jugar la Copa en nuestro campo y contra el Athletic. Aunque esta competición no es nuestro objetivo, pues nosotros peleamos por ascender de categoría, encontrarnos con un partido así en ese camino es muy especial para nosotros y para la afición. Lo preparamos con esa responsabilidad.

No están acostumbrados a jugar entre semana. ¿Les trastoca mucho los planes?

-Es cierto que no tenemos la costumbre de jugar dos o tres partidos por semana, lo hacemos de forma puntual, pero no debe ser ningún problema para los jugadores.

Si la Copa ya de por sí es una competición complicada para los equipos de Segunda B, lo es mucho más con eliminatorias de ida y vuelta. ¿Qué le parece el sistema actual?

-Esto es como la lotería, cuantos más boletos juegues más opciones tienes de que te toque. En nuestro caso es al revés. Al Athletic cuantos más partidos le des contra uno de Segunda B, más facilidades tiene. A un partido puede pasar de todo y eso tenemos que pensar para el partido de ida, que tengamos un partido en el que nos salga todo muy muy bien y que el Athletic no esté bien ese día. Que eso pase dos días no será fácil, desde luego, más aún jugando en su campo el partido de vuelta. Sabemos que tenemos una tarea muy complicada, pero es fútbol y en este deporte no todo está inventado afortunadamente.

¿Considera que sería más justo que se disputase a un solo partido?

-Desde el perfil de un entrenador de Segunda B, en un equipo humilde, te diría que sí. Si me preguntas en otras circunstancias, en las del Athletic por ejemplo, seguramente diría que por qué.

Lo que sí parece más sencillo es el análisis de un rival de Primera División.

-Claro. La Primera División la ves de continuo y el Athletic es muy conocido. Apenas cambia, mantiene su base y a ello le añade la sabia nueva de la cantera cada año. Es un equipo al que conocemos bien.

Y más alguien como usted, que entrenó al Sestao River en las temporadas 2013-14 y 2014-15...

-Además en esos dos años coincidió que ya estaba Ernesto Valverde. Me fijo en el Athletic porque me gusta cómo juega; me gusta su entrenador. Es un técnico que tiene las ideas claras y sus equipos tienen su sello. Es un equipo al que hemos seguido y al que seguimos con cierta frecuencia porque la cercanía nos permite también verlo con asiduidad.

¿Qué Athletic espera mañana en El Sardinero?

-El de siempre, el que compite en todos los partidos. Es un equipo que sale a por todas, muy intenso, valiente, dinámico... Que realiza una presión muy asfixiante y que imprime un ritmo muy alto al juego con y sin balón. Pelea cada momento del juego y, en definitiva, es un equipo complicado. No en vano está arriba en Primera.

La Copa invita a que los técnicos hagan rotaciones ¿Cree que Valverde alineará un equipo plagado de suplentes?

-Intuyo que Valverde hará cambios porque es un equipo que está en tres competiciones y tiene una plantilla amplia. Aunque en cualquier caso será un equipo reconocible.

¿Confía en que no juegue Aduriz?

-Es un jugador extraordinario. ¿Si quiero que no juegue? Pero es que quien juegue va a ser bueno y va a tener ganas de estar bien ese día. Igual mejor que juegue Aduriz. Las grandes victorias se hacen con los grandes rivales. Entonces, como creo que tenemos por delante una tarea muy muy difícil, no va a ser mucho más difícil porque juegue Aduriz. Si me das a elegir, prefiero que juegue.

¿Cree que el Athletic no está a su mejor nivel?

-A mí me encanta el Athletic. Ese equipo tiene alma, intensidad, atrevimiento y va a ganar a cualquier campo. Es un rival al que probablemente no quiera ver nadie. Eso lo dice todo. Tiene un gran entrenador que lo hace francamente bien y el equipo tiene un gran mérito.

¿Con qué Racing se encontrará el conjunto rojiblanco?

-A nuestra manera, pero también intentaremos ser reconocibles. Hemos tenido cuatro lesiones de jugadores importantes que nos están obligando a reinventarnos después de un gran arranque, pero pondremos a los once que mejor estén para competir.

Por lo que ha comentado antes, la liga es una prioridad para ustedes.

-Sí, pero el Racing se tiene que tomar cada partido oficial que juega, más aún en El Sardinero, con muchísima responsabilidad. Entendemos que el equipo tiene que ser, dentro de nuestras posibilidades, lo más fiable posible y eso vamos a tratar de hacer.

Aunque no parece precisamente el suyo el grupo más sencillo de Segunda B. La Cultural Leonesa, con la Academia Aspire detrás, tiene unos recursos económicos importantes...

-Es un grupo duro. Nos está tocando vivir a un equipo extraordinario en números como es la Cultural. Está haciendo una primera vuelta brillante, no se le puede poner ningún pero. Y nosotros estamos aguantando el tirón. Creo que el equipo está haciendo unos números muy buenos y somos el segundo equipo que más puntos lleva de la categoría, empatados con el Barça B.

Se marchó del Racing en 2008, cuando era técnico del filial, y regresó en verano, ocho años después. ¿Como se encontró al club?

-Llegué a un equipo que venía de no lograr el ascenso y de pasar dificultades. Aunque parece que se allana el camino, es un club que está en un momento muy difícil, que nada tiene que ver con el que dejé. Me fui de un Racing que estaba en Primera, con una solvencia económica importante, una buena estructura deportiva... Y desgraciadamente he venido a un equipo que es muy humilde. Veo, eso sí, que la gente que queda en el club, muy inferior en número a la de entonces, es gente que tiene muchas ganas y mucha implicación. Son personas muy trabajadoras.

Por lo que cuenta, parece que la reinvención del equipo va por buen camino.

-Sí. Lo mejor que tiene este club es la parte social. Luego hay dos pilares, el económico y el deportivo y ahí estamos centrando muchos esfuerzos. Parece que en lo económico la cosa va poco a poco mejor, con empresarios implicados. Y en el proceso deportivo también. Si somos capaces de cumplir y regresar al fútbol profesional, todo va a ser más fácil.

¿Puede ser peligroso que no regresen a Segunda a corto plazo?

-Eso sí que es cierto. No hemos ocultado que nuestro gran objetivo es ascender. Este club necesita regresar al fútbol profesional lo antes posible para volver a tener viabilidad. Nuestro objetivo es ese y está grabado a fuego. Todos somos conscientes de ello.

En el aspecto deportivo, el trabajo de cantera se antoja vital.

-La cantera del Racing siempre ha estado y aparece en los momentos más complicados. Es lo primero a lo que se recurre, lo más barato. Históricamente, esta cantera ha dado unos frutos enormes. Ahora tenemos una remesa de chicos muy interesantes, recién salidos del juvenil, algunos incluso juveniles, que trabajan con nosotros. Queremos que nos ayuden a mantener un buen nivel deportivo en el presente y en el futuro.

¿Le da rabia que el Racing esté pasando por un momento así?

-Sí, como a cualquier racinguista. Si miras la historia reciente del club, en los últimos 20-30 años ha estado casi siempre en Primera División, muy pocos en Segunda y muchísimos menos en Segunda B. Estamos en un momento difícil, la afición se ha rejuvenecido y la gente está deseando volver a vivir esos momentos. Es un momento difícil, no cabe duda, pero también chulo. La afición se ha unido mucho por todo lo vivido y en una situación así el Racing y su afición son indestructibles. La verdad es que vemos el futuro con cierto optimismo.

Donde tampoco parece que las cosas vayan muy bien es en Sestao. Usted que estuvo allí, ¿cómo está viviendo el delicado momento del River?

-Estuve allí dos años buenísimos. Un club en el que estuve muy a gusto. Ahora está en una situación complicada que espero sean capaces de revertir. Lo deseo profundamente.