De esta Aste Nagusia he aprendido que la gente de Bilbao no solo nace donde quiere, sino que se viste como le da la gana. Hemos visitado diferentes espacios por todo Bilbao descubriendo qué ropa lleva cada uno y, definitivamente, lo que prima en Bilbao durante su semana festiva es la comodidad. Nadie quiere perderse las miles de actividades que hay dispersas por la ciudad, por eso, buscan llevar puestas las prendas con las que mejor se sienten. Eso sí, siempre siendo fieles a su estilo.

El pañuelo es, indudablemente, el rey de los accesorios, sin embargo, no todos usan el mismo, ni se lo ponen de la misma manera, ni lo llevan a los mismos sitios. El que más se ve por las calles de Bilbao es el de la baldosa, sin embargo, hay quien considera “más elegante” el azul con el escudo bordado y quien no se complica y a todas las fiestas de Euskaldi lleva el mismo: el tradicional azul y blanco de cuadros.

La gran mayoría lo lleva anudado al cuello, aunque por la noche los he llegado a ver estos días hasta de corbata. Ingenio, desde luego, no falta. Quienes no lo utilizan son aquellos que se ponen sus mejores galas ya sea para ir al teatro o a los toros. Allí, los pañuelos brillan por su ausencia. También está quien lleva el pañuelo hasta de falda. Beatriz Marcos fue la protagonista de la primera entrega de ‘La alfombra azul’ y, pocos looks le pueden hacer frente.

El outfit más habitual es de playeras, pantalones y camiseta, tanto de día como de noche. Sin embargo, hay quien arriesga durante las mañanas y se calza unas sandalias. Eso sí, una vez cae el sol, todos los pies a cubierto. Los días de lluvia no ha importado ir guapo o guapa, sino la practicidad. Por ello, tanto el primer día como la última tarde de las fiestas reinaron los chubasqueros ‘de parque de atracciones’.

ACCESORIOS

Uno de los accesorios que ha triunfado esta Aste Nagusia ha sido un gorro que contaba con dos cuerdas y al estirarlas, salían las orejas que llevaba en la parte de arriba. Los había de varios colores, aunque el que más ha triunfado ha sido el amarillo, que recordaba a Pikachu. También se han podido ver, como cada año, los gorros de colores, las gafas de sol en plena noche, los broches de Marijaia y las pulseras con la baldosa de Bilbao. Accesorios que hacen meterse a uno de lleno en la fiesta.

Los looks, desde luego, han sido variados dependiendo del lugar. Tanto es así que es hasta sencillo identificar quien va a txosnas, quien al teatro y quien a los toros. Pasa reconocer al txosnero o txosnera no hay más que mirar a los pies. Si lleva las zapatillas oscuras, viejas y sucias no es que no haya pasado por casa, sino que son las que en el armario tienen puesto un cartel que pone “las de Aste Nagusia”. Para saber quién va a los actos más tradicionales como las bilbainadas que se celebran en La Pérgola hay que fijarse en si llevan anudado al cuello pañuelo y si llevan encima algún elemento relacionado con la cultura vasca, ya sea una camiseta con un lauburu o la falda de arrantzale. Sin embargo, es de los pocos espacios donde se ven una gran cantidad de trajes típicos.

Identificar quién va a los toros está algo más complicado, aunque parezca mentira. Y es que puedes confundirlos con los txosneros o con los invitados a una boda, porque de verdad que en Vista Alegre se puede ver todo tipo de looks. Por todo ello, una vez más Aste Nagusia se corona como una fiesta para todos, en la que también todas las formas de vestir tiene su lugar y su espacio.