BILBAO. La Policía Municipal de Barakaldo le ha arrestado durante la madrugada de este jueves, en el marco de un dispositivo especial puesto en marcha por el Ayuntamiento tras la aparición durante los últimos días de agosto de comida para mascotas envenenada.

Según han informado en una rueda de prensa la alcaldesa, Amaia Del Campo, y el concejal de Seguridad Ciudadana, David Solla, el presunto autor ha sido "pillado in fraganti" en el Paseo Dolores Ibarruri cuando lanzaba restos de comida al suelo y ya ha sido puesto a disposición judicial para que "pueda ser juzgado por este hecho atroz".

"Es difícil comprender qué se le pasa por la cabeza a una persona que deja trampas para hacer daño a las mascotas, que de forma indirecta también podrían hacer daño a niñas y niños que se encuentren por la zona", ha subrayado la alcaldesa. Por ello, ha asegurado que el Ayuntamiento no va a "tolerar comportamientos de este tipo" y actuará "con mano dura".

El presunto autor de los hechos ha sido localizado por agentes de paisano que se encontraban vigilando la zona del bidegorri. El hombre ha despertado sus sospechas ya que llevaba varias mochilas y riñoneras, junto a una bicicleta y presentaba "una actitud nerviosa".

El edil de Seguridad ha relatado que, "en un momento dado, el hombre ha comenzado a caminar a la vez que, desde una de las riñoneras que portaba, lanzaba restos de comida al suelo", por lo que los agentes se han dirigido hacia él. Sin embargo, el sospechoso ha comenzado a huir a la carrera y "ha lanzando algo al suelo, que ha resultado ser medicamentos en forma de comprimidos que han sido encontrados por los agentes".

Al detenido se le han ocupado tres bolsas de comida en las que tenía salchichas similares a las encontradas los días anteriores, dos paquetes de arroz, carne y pienso para animales domésticos.

El hombre ha sido imputado como presunto autor de un delito de Maltrato Animal. Según han explicado desde el Ayuntamiento, las evidencias obtenidas serán puestas a disposición judicial para su análisis, con el fin de determinar si los alimentos incautados tienen añadidos tóxicos y su "alcance en caso de ingesta por animales domésticos".