El 48% de las personas mayores y el 100% de jóvenes afirman haberse sentido discriminados por razón de su edad, según una de las conclusiones del programa de participación público social del Departamento vasco de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Agenda Nagusi 2022, que este año se ha centrado en analizar la discriminación asociada al edadismo. En un acto celebrado ayer jueves en Bilbao, las conclusiones de este informe fueron dadas a conocer por la consejera Beatriz Artolazabal y la coordinadora de la Agenda Nagusi, Beatriz Gázquez.

La consejera explicó que a lo largo de este año, se han desarrollado once foros intergeneracionales de debate y reflexión dirigidos a “afianzar” la cultura de la participación y la gobernanza colaborativa en Euskadi. En total, participaron en estos encuentros más de 300 personas de diferentes perfiles, entre jóvenes, mayores. Tal y como recordó la consejera, el edadismo es “una forma de discriminación” que, en base a la edad, “categoriza y divide a las personas por atributos que les ocasionan daño, desventaja o injusticia, al tiempo que menoscaban la solidaridad intergeneracional”.

Artolazabal resaltó que “una de las más llamativas conclusiones” de este año ha sido el dato que arroja que el 48% de las personas mayores que han participado en el programa han afirmado haberse sentido discriminadas “en alguna ocasión” debido a su edad, mientras que el 100% de los jóvenes participantes respondió a esa pregunta de forma afirmativa.

El objetivo del proyecto, explicó Artolazabal, era llevar a cabo “un proceso de reflexión conjunta para reconocer, analizar y combatir los estereotipos, los prejuicios y la discriminación de las personas en función de su edad”.

La coordinadora de Agenda Nagusi, Beatriz Gázquez, se adentró en su intervención en algunos de los estereotipos que han salido a la luz en los diferentes foros realizados. Así, por ejemplo, mencionó que los jóvenes asocian la vejez con la “fragilidad, la enfermedad o el cuidado” y perciben a las personas mayores como “serias, conservadoras, tradicionales o aburridas”, aunque también “con más experiencia y conocimiento”. Igualmente destacan de esa franja de edad que tienen “más capacidad de sacrificio”. Por su parte, las personas mayores perciben a los jóvenes como “más egoístas e individualistas”, además de “despreocupados, pasotas y más irresponsables” y sostienen que están “todo el día colgados del móvil y las redes sociales” aunque consideran que los jóvenes, en general, están “más formados, manejan mejor la tecnología” y son “más alegres”.

Los foros de debate persiguieron un doble objetivo. Por un lado, reflexionar en torno a los valores que imperan en el modelo de sociedad actual y en cómo afectan a las diferentes generaciones. Por otro lado, identificar lo que Gázquez definió como “casuísticas”; aquellas situaciones de discriminación por razones de edad que puedan darse en ámbitos como el laboral, el doméstico, el social, el económico, el sanitario o el vinculado a la imagen y los medios de comunicación. Las aportaciones recogidas durante el proceso se traducirán a acciones e iniciativas encaminadas a la lucha contra el edadismo.

En corto

Heterogénea

Envejecimiento. Una de las principales características del envejecimiento es la heterogeneidad”. Este sector poblacional engloba a personas de diferentes generaciones, diferente género y condición en circunstancias históricas y socioculturales diversas.

Uniforme

Diferente. Cada persona envejece “de un modo y a ritmo diferente, en base a factores de carácter tanto interno como externo” pero “se tiende a uniformizar la vejez.

Autoinfligida

Discriminación. Tanto la consejera Artolazabal como la coordinadora de Agenda Nagusi, Beatriz Gázquez, han aludido a la “discriminación autoinfligida” por la que la propia persona mayor se condena a sí misma con ideas como: “Yo ya no tengo edad”.