El Ararteko alertó ayer domingo sobre el crecimiento de la desigualdad social en Euskadi y subrayó la necesidad de “cambios estructurales profundos” para evitar que las diferencias sociales aumenten.

El defensor del pueblo vasco hizo pública una declaración institucional con motivo de la celebración hoy lunes del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza instaurado por las Naciones Unidas para concienciar sobre las consecuencias de la pobreza y para contribuir a la lucha por la dignidad, la libertad y la igualdad de las personas.

El Ararteko reconoce que el sistema vasco de protección social ha permitido evitar situaciones de pobreza severa en Euskadi y hacer frente al riesgo de exclusión social.

Opina también que la nueva Ley para la Garantía de Ingresos y la transferencia del Ingreso Mínimo Vital deberían servir para dar respuesta a todas las situaciones de vulnerabilidad económica y de precariedad laboral en Euskadi.

Todo ello debe ir en consonancia con el informe del relator especial sobre la extrema pobreza y los derechos humanos de las Naciones Unidas, Olivier De Schutter, “quien propone replantear la protección social como un derecho humano y no como una obra de caridad”, mantiene el Ararteko.

“La erradicación de la pobreza no solamente exige transferencias sociales, sino medidas para la lucha contra la discriminación y la desigualdad social que permitan a todas las personas acceder a una formación cualificada, a un trabajo de calidad o a un alojamiento seguro y adecuado”, insiste el defensor del pueblo vasco.

Recalca el derecho de las persona “a disfrutar de una vida digna, con independencia del género, etnia, nacionalidad, edad, diversidad funcional o salud” y asegura que el compromiso firme con este planteamiento “únicamente puede ir unido a la fraternidad en lo económico”.

“Para frenar la concentración de los recursos económicos, son necesarias políticas públicas y un marco jurídico que le haga frente. La búsqueda del beneficio económico, sin tener en cuenta los derechos humanos, la contaminación medioambiental o la miseria a la que aboca a vecinos, a países y a continentes enteros, ya no es sostenible, ni social ni políticamente”, asegura el Ararteko.

Finalmente recuerda que la Comisión Europea, en la recomendación del Consejo de 28 de septiembre de 2022, señala haber constatado un “incremento de personas en riesgo de pobreza en Europa”, reconoce que ha disminuido el impacto de las transferencias sociales y plantea que las medidas derivadas del confinamiento por la covid han tenido un impacto desproporcionado en las mujeres y en situaciones de vulnerabilidad.

Por ello, propone diversas medidas para garantizar unos ingresos mínimos para todas las personas en situación de riesgo y exclusión social o con salarios precarios, así como políticas activas de empleo y de inclusión social.

En esta misma línea, el Ararteko pide a las administraciones públicas y a la sociedad, especialmente a quienes más poseen, que construyan, de manera fraterna y solidaria, las condiciones para que se rompa el círculo de la pobreza y se avance en igualdad social y en dignidad.

El apunte

Círculo pobreza. El Ararteko pide a las administraciones públicas y a la sociedad, especialmente a quienes más poseen, que “construyan, de manera fraterna y solidaria, las condiciones para que se rompa el círculo de la pobreza y se avance en igualdad social y en dignidad”.

Derechos humanos. Dado el momento actual, el Defensor del Pueblo advierte: “La búsqueda de beneficio económico, sin tener en cuenta los derechos humanos, la contaminación medioambiental o de la miseria a la que aboca a ya no es sostenible”.