El miedo al contagio al covid-19 ha aupado a las autocaravanas y remolques como una alternativa vacacional para este verano de recogimiento y apenas viajes al extranjero. “Desde que abrimos el pasado día 11 de abril todos los días estamos recibiendo llamadas y visitas”, confiesa Mikel Álvarez, propietario de la empresa Mikel Karabanak ubicada en la localidad de Iurreta.

El aislamiento que procuran los viajes en caravana de cara al coronaviruses la baza principal que está incrementando hasta cifras insospechadas la demanda de información para el alquiler. Isabela Mercio, responsable de mercado de la firma europea Indie Campers en España y con instalaciones en Erandio, confirma el interés. “Es la forma más segura de viajar. Además de permitir la autonomía y el aislamiento, es posible dormir, comer y tener ocio en un solo lugar, sin tener que desplazarse a hoteles y restaurantes, lo que aumenta el riesgo de contagio”, detalla. José Manuel Jurado, presidente de Aseicar, la asociación que reúne a las empresas en el Estado que venden y alquilan estas casas rodantes indica que “el caravaning como forma de turismo itinerante, se va a ver reforzado”, según asegura, porque es “una forma de ocio vacacional completamente independiente, como si fuese nuestra propia casa, donde poder disfrutar con total seguridad de nuestros periodos vacacionales”. Las ganas por recorrer carreteras con la casa a cuestas ya es una realidad incluso durante el confinamiento. Isabela Mercio aporta diferentes datos. “La tendencia en Europa del porcentaje de reservas de clientes que viajan en su propio país fue del 112% en abril y del 165% en mayo en comparación con el mismo período del año pasado. En España este aumento fue del 47% el mes pasado”, asegura. Por lo que respecta a su sede en Bizkaia “hemos recibido reservas principalmente para el mes de julio”, apunta.

De todas formas, Ana Elorriaga, responsable de la empresa Autocaravanas Erandio, pone los pies en el suelo. Reconoce que están “recibiendo sobre todo muchas llamadas y correos electrónicos de gente con dudas de nuevos alquileres que desconocen este mundo”, pero aquellos veteranos que “tenían intenciones de salir este verano, ya han hecho la reserva con tiempo”. Por esta razón su empresa tiene su docena de vehículos ya comprometidos para julio y agosto y, según explica, “no cabe aumentar la flota de repente”.

El año pasado en el Estado se matricularon alrededor de 9.000 autocaravanas lo que supone un incremento del 20% con respecto al año anterior. Este ejercicio la cifra de nuevos vehículos en las carreteras es una incognita ya que confluyen dos hechos contrarios. Por un lado, el parón de dos meses de toda actividad por la pandemia y, por otro, el boom del caravaning como fórmula de veraneo anticovid.

La tónica habitual de las empresas de alquiler es incorporar a su parque nuevos vehículos con la matriculación en marzo para activarlos de cara a Semana Santa y después ya conectar con la temporada veraniega. Elorriaga desvela cómo “este año, con todo cerrado desde marzo por la pandemia, no se ha matriculado nada y no merece ahora la pena comprar nuevos vehículos para lo que resta de temporada, porque en septiembre se bajan los alquileres, y el vehículo ya es viejo”.

está en ebullición el mercado del alquiler para no utilizar las instalaciones comunitarias si la instala en un camping

Otro fenómeno que se ha notado al alza en estas semanas es la de los alquileres piratas. Aquellos dueños particulares de autocaravanas que no las van a utilizar este verano y las rentan mediante anuncios en Internet. “Es una situación que venimos padeciendo desde hace años”, especifica Mikel Álvarez, que augura que “este año se va a acrecentar”. Pero, ojo a los que optan por esta fórmula, porque es ilegal y puede traer más de un disgusto. Ana Elorriaga prevé que “va a haber gente que quiere hacer el agosto alquilando de manera privada pero es peligroso porque si se tiene un accidente el seguro no se va a hacer cargo”.

Luego también esta el tema fiscal. “Si es de uso particular no se le puede dar otro de servicio público”, concreta, además del propio estado de los vehículos. Mikel Álvarez comenta que “nuestras caravanas tienen un año y medio de vida, como mucho dos, y este verano varios clientes estrenarán una, con lo que su estado no es igual evidentemente que un vehículo de un particular”.

¿Y cómo recibirán los autocaravanistas de toda la vida el nuevo escenario? Koldo Zabarte, vocal de la junta directiva de Sorbeltz, club vasco de usuarios de autocaravanas augura que “va a suponer que mucha gente inexperta se inicie en este mundillo por eso desde el club hemos elaborado un decálogo del buen autocaravanista”, el cual se puede consultar y descargar desde la web de la asociación. Mucho novato que desconocerá legislación y reglas, por lo que Zabarte hacía hincapié “en que está prohibido desplegar elementos tales como toldos o sillas, salvo en campings y parkings con servicios”. Son cerca de 70 los espacios habilitados, principalmente en Hegoalde, para estacionar estos vehículos y donde se puede, por ejemplo, cargar agua y vaciar depósitos de residuos.

A pocos días del fin del estado de alarma, desde Solbertz están en proceso de espera. Su vocal prevé que “habrá un gran movimiento a nivel estatal, por lo que estamos a la espera de que las instituciones nos aclaren algunos criterios y condiciones a tener en cuenta”. Además, espera que “este no va a ser boom pasajero” por lo que confía en que “los diferentes Ayuntamiento se animen a habilitar más parkings con servicios de autocaravanas”. También recomienda a los nuevos usuarios que “respeten las distancias y extremen las medidas higiénicas a la hora de cargar y vaciar los depósitos”.

Se trata de medidas de salud que con el coronavirus pululando se han tomado muy en serio las empresas asociadas en Aseicar. Por ello, desde el pasado 11 de mayo han creado un protocolo sanitario y social y un sello concreto para combatir virus. Autocaravanas Erandio lo sigue como socia de la agrupación. Su responsable explica cómo “nuestra higienización siempre ha existido utilizando sistemas de ozonificación y con ello seguimos; pero como no está demostrado por Sanidad que eso mate el covid, ahora hacemos ademas nebulizaciones de peróxido de hidrógeno. Eso sí mata el coronavirus”.

Julio y agosto. Son los meses por excelencia para montarse una ruta a bordo de una autocaravana o usando un remolque tirado por el vehículo propio. Son los meses que todas las empresas de alquiler consideran temporada alta y el precio del vehículo aumenta. Una autocaravana de alta gama con espacio holgado para una familia de cuatro miembros (puede ser ocupada hasta por seis personas) puede costar como media 180 euros al día en verano. El precio se reduce a 150 en temporada media y baja a los cien en las semanas de invierno excepto puentes, Navidad y Semana Santa. Por lo general, el arrendamiento es por diez días aunque hay quienes aprovechan un puente o alargan a dos semanas. Mikel Alvarez destaca que la elección entre autocaravana o solo remolque “es similar, ya que depende de qué ruta hace el cliente le viene mejor una opción u otra”.

“Este año, con todo cerrado desde marzo con motivo de la pandemia, no se ha matriculado nada”

Responsable de Autocaravanas Erandio

“Este ‘boom’ va a suponer que mucha gente inexperta se inicie en este mundillo”

Vocal de la asociación Sorbeltz

“Desde que abrimos el 11 de abril todos los días estamos recibiendo llamadas y visitas”

Director de Mikel Karabanak