El Gobierno vasco iniciará la próxima semana las mediciones de temperatura aleatorias a los usuarios de transporte público y entregará medio millón de mascarillas a los operadores para que sean distribuidas "únicamente" a los viajeros que, en el momento de acceder a los trenes o autobuses, carecen de esta protección.
Tras varias jornadas de prueba, las mediciones se pondrán en marcha la próxima semana y será personal de Cruz Roja en Araba y de la DYA en Bizkaia y Gipuzkoa el encargado de llevarlas a en las estaciones de Metro Bilbao y Euskotren así como en las estaciones de autobuses de las tres capitales vascas.
Las personas que superen los 37 grados serán atendidas por los equipos sanitarios, ha informado este viernes el Gobierno vasco en un comunicado.
Ante la fase 1 de desescalada, que comienza el próximo lunes en aquellas áreas que cumplan con los requisitos exigidos por el Ministerio de Sanidad, el ejecutivo vasco ha anunciado este viernes que dispone de 500.000 mascarillas que serán distribuidas entre cada operador de transporte en un número proporcional al volumen de viajeros que transporta.
Será "cada operador" quien realice las entregas de estas protecciones, cuyo uso es obligatorio en el transporte público desde el inicio de la fase cero de desescalamiento, el pasado lunes.
Frente a los repartos generalizados que se llevaron a cabo en las últimas semanas en este caso se dará una mascarilla "únicamente" a aquellas personas que acceden a un transporte público y, "por razones ajenas a su voluntad" como que la que tenían estaba deteriorada o la imposibilidad de haber adquirido u "otra causa justificada" no dispongan de la protección.
Los personas que tengan una tarjeta BAT, Barik o Mugi podrán recoger las mascarillas en las Oficinas de Atención a la Ciudadanía.
Además, en estaciones con acceso regulado donde existe un control de pasajeros mediante barrera se han instalado dispensadores gel higienizante en los vestíbulos y en los andenes.
El Gobierno vasco señala que la entrada en la fase 1 va a generar un incremento de la movilidad respecto a la situación actual, lo que va a requerir de una "nueva readecuación de la oferta de transporte público".
En el conjunto de la CAV un día laborable previo a la pandemia de coronavirus viajaban en transporte público 758.719 personas, mientras esta semana, en la que se ha desarrollado la fase 0 de desconfinamiento, ha sido de 137.623, una cifra que supone un incremento del 35 % respecto a la semana anterior.
Es una subida "homogénea, que se ha dado en todos los modos de transporte", señala el Ejecutivo autonómico, que ve "previsible" un nuevo incremento de la demanda de transporte para la próxima semana, que será atendido, asegura, "cumpliendo con todas las medidas establecidas por las autoridades sanitarias para hacer frente al COVID-19".
Recalca que es "obligatorio e inexcusable" el uso de mascarilla y recuerda que los usuarios deben mantener la máxima distancia posible entre sí en las estaciones, paradas de autobús, andenes e interior de los trenes, tranvías y autobuses.
