En declaraciones a Radio Euskadi, recogidas por Europa Press, el Defensor del Pueblo Vasco ha analizado la situación generada por la pandemia de covid-19 y las denuncias que ha recibido al respecto.
En referencia al hecho de que finalmente los menores de 14 años puedan salir desde este domingo a las calles, Lezertua ha reconocido que han sido "numerosos" los padres que se habían dirigido al Arateko pidiendo su intervención para "intentar convencer a las autoridades de que era necesario aliviar la situación de los menores de edad" por los efectos perjudiciales del confinamiento.
"Estábamos en contacto con las instituciones y había recomendaciones de que se procediera así desde Naciones Unidas por lo que bastaba con insistir en que existía esa petición de que hubiera tiempo de ocio para los niños al aire libre", ha añadido.
Por otro lado, se ha mostrado partidario de fijar un precio máximo para las mascarillas, ya que "parece que dejarlos en manos exclusiva del mercado produce distorsiones importantes en los precios". Asimismo, ha advertido de que "no estaría mal repartirlas de manera gratuita para no sobrecargar las economías familiares", aunque ha considerado que establecer "un precio moderado puede tener un efecto parecido".
Cuestionado por la situación que se ha vivido en las residencias de mayores y las altas cifras de fallecimientos, ha defendido que "la imprevisibilidad de la crisis ha cogido desprovistas a todas las instituciones".
"Nadie había adivinado que el virus se diseminara a una velocidad parecida, pasando rápidamente a tener miles de casos. En la medida en que faltaban materiales indispensables se han visto afectadas también por la falta de material de protección de los sanitarios y gerocultores y eso ha podido motivar el número de casos de contagios", ha sostenido.
En este sentido, ha reconocido haber recibido "bastantes reclamaciones" por falta de material y el "peligro que ello representaba para los profesionales y los residentes". "Pero la dificultad en un mercado mundial extremadamente convulso para conseguirlo ha dificultado aprovisionarse de ello", ha justificado.
Asimismo, se ha mostrado partidario de "repensar un poco el modelo asistencial de las residencias". "Tenemos una población cronificada con patologías varias y grados de dependencia elevados, y hay que asegurarse de que lo que prima es el tratamiento a esos pacientes que son los que están en las residencias... que prime la noción de servicio público", ha añadido. Autor: IDA/MGB
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