- Primero fueron los más de 8.000 usuarios de residencias y técnicos del ámbito sociosanitario porque constituyen el colectivo más indefenso ante los estragos de esta enfermedad. Las pruebas para todos ellos están ya realizadas o programadas. Y ahora llega el turno para los más de 35.000 profesionales de Osakidetza, esos que siguen batallando en primera línea contra el virus, muchas veces sin saberlo, para evitar que la covid-19 destruya más vidas o que se propague en hogares y en los hospitales.

Y es que la única forma de derrotar a esta pandemia es minimizar su alto poder de contagio. La adopción y el respeto de medidas de autoprotección e higiene son esenciales, pero para algunas personas hace falta algo más debido al riesgo que asumen a diario al entrar en contacto con personas infectadas, confirmadas o no. Por eso el Gobierno vasco ha intensificado su estrategia de prevención entre el personal del Sistema Vasco de Salud.

Las primeras pruebas rápidas ya han empezado a ser realizadas y según avanzó ayer Nekane Murga, el despliegue total se completará durante las próximas semanas. Se hará de manera organizada y gradual. "Creemos que con esta medida podremos identificar cuántos profesionales han generado anticuerpos y reforzar así su seguridad y la de los pacientes", apuntaba la consejera de Salud. Los primeros test rápidos serán para "colectivos de especial riesgo" como el personal de las UCI, de las Urgencias o el que esté atendiendo a pacientes con covid-19.

Además, según indicó la consejera, en esa primera fase se atenderá a los equipos quirúrgicos y al personal de las unidades que asisten a pacientes oncohematológicos. La hoja de ruta diseñada por el Departamento de Salud recoge que, con posterioridad y de forma paulatina, las pruebas rápidas de coronavirus se extenderán al resto de profesionales de Osakidetza.

La consejera volvía a enviar ayer un mensaje de agradecimiento a este importante colectivo "por su enorme esfuerzo" en los días más crueles e inciertos de la pandemia, en las jornadas actuales, algo menos duras -a tenor de los datos- "y el que tendrán que seguir realizando en las próximas semanas para poder recuperar poco a poco la normalidad en los centros sanitarios", enfatizó Murga.

Y es que, tal y como adelantó la consejera, los responsables técnicos del Departamento trabajan ya en la definición y planificación de una estrategia que permita recuperar, con garantías, toda aquella actividad asistencial que quedó en suspenso hace mes y medio a causa del coronavirus.

El impacto de la pandemia parece estar disminuyendo y si la tendencia a la baja de hospitalizaciones se mantiene en el tiempo, "se iniciará también un proceso progresivo de recuperación"; en primer lugar de las consultas, pruebas y operaciones que "siempre según criterios médicos" tengan un carácter urgente y preferente. Y en una segunda fase se retomarían aquellas otras actividades programadas que fueron anuladas o suspendidas.

Todo ello será posible gracias a que los hospitales vascos están recuperando áreas y unidades para enfermos no-covid. La cantidad de ingresados en planta se ha reducido casi a la mitad (40%) desde el 1 de abril y un 30% los de UCI. Según el último recuento, Euskadi dispone de 108 camas libres en sus UCI: 63 en Bizkaia, 23 en Gipuzkoa y 22 en Araba. Esta evolución ha animado al Departamento de Salud a ir diseñando esa vuelta a la nueva normalidad.

"Siempre con mucha prudencia", valoró la consejera Murga, al tiempo que hizo hincapié en una idea clave ligada al enigmático comportamiento de la pandemia: "La prioridad es superar esta emergencia sanitaria y todas las medidas que se adopten están condicionadas a este objetivo". Es decir, que en el caso de que la situación empeore, se volverían a aplazar operaciones, pruebas y consultas. Ya sea en los próximas semanas o meses, porque cada vez son más las voces que apuntan a un rebrote en otoño.

La realidad en Euskadi dice que algunas áreas de atención vuelven a estar disponibles para atender a pacientes no-covid después de haber sido debidamente higienizadas y desinfectadas. "Estamos evaluando la repercusión en todas las áreas asistenciales para planificar de una manera paulatina y adaptada a la evolución de la pandemia cómo priorizar actividades que aporten mayor valor a las necesidades de la atención a la ciudadanía", describía Murga. Eso sí, la consejera volvió a advertir que los centros de salud y hospitales deberán mantener vivos "circuitos específicos" para pacientes positivos en coronavirus "y protocolos de identificación precoz para reducir el temido contagio intrahospitalario".

13.200

La consejera de Salud, Nekane Murga, dijo ayer que se está trabajando para identificar a los profesionales sanitarios que han podido utilizar alguna de las mascarillas defectuosas que habían sido repartidas por el Gobierno español en Euskadi. Murga precisó que se recibieron 124.000 unidades de la marca Garry Galaxy, que es en la que se ha detectado el problema, y se repartieron 13.200, aunque "no todas son defectuosas". Las citadas mascarillas no tienen "capacidad de filtro". "Estamos trabajando para que se identifique, se realice un seguimiento y se tomen medidas para reducir los riesgos entre los profesionales que hayan podido utilizarlas", subrayó.

215

La cifra de municipios que cuentan con al menos un caso positivo de covid-19 asciende a 215. Gasteiz continúa siendo un día más el que presenta más número de infectados con 2.672, seguido de Bilbao con 2.203. Barakaldo tiene 632, mientras que Donostia suma ya 530 pacientes. Le siguen Getxo (435), Basauri (385), Santurtzi, que tiene 271 casos, Galdakao (199), Arrasate (194), Irun (189), y Eibar y Portugalete, ambos con 187.

1.020

Respecto a la letalidad de la pandemia, de las 1.020 muertes registradas hasta este viernes, 525 eran varones y 495 mujeres, aunque por contra de los 12.355 casos positivos confirmados son mayoría las mujeres con 7.197 casos, por 5.158 hombres.