Bilbao - El domingo no escampó a tiempo para salvar la fiesta de las ikastolas de la quiebra económica. “Solo hemos llegado a la cuarta parte de los ingresos previstos”, valoró ayer Ibon Goitia, director de Azkue Ikastola, organizadora del Ibilaldia, quien señaló que la lluvia estropeó una jornada que también sacó a relucir la solidaridad de la sociedad vasca. Las dos cuentas corrientes abiertas por el centro lekeitiarra para cubrir la deuda adquirida están recibiendo aportaciones provenientes de toda Euskal Herria. A pesar de ello, Goitia realizó un llamamiento a que la gente siga colaborando con el objetivo de llegar Haratzago (más allá), como decía el lema de esta edición, y poder seguir con el proyecto de la ikastola.

Todavía no han cerrado las cuentas ni realizado ningún balance, pero sí han analizado el histórico de Ikastolen Elkartea. “Teniendo en cuenta todas las fiestas que se hacen -Nafarroa Oinez, Kilometroak...- solo hemos alcanzado el mínimo”, apuntó el director de Azkue Ikastola, quien consideró que se trata de una cifra muy alejada de la inversión realizada por el centro docente para la puesta en marcha de la fiesta con alquiler de carpas, escenarios, equipos de música, contratación de grupos... “Estamos quedando lejos de igualarlo con los ingresos. Ha sido un desastre”, admitió el director, refiriéndose no solo a la asistencia, sino a los cambios de planes a los que obligó el aguacero desde primera hora de la mañana cuando decidieron cerrar el cuarto gune.

“Tuvimos que cambiar la cartelera de grupos de música y de teatro. Con aquellos también tuvimos que negociar. Ellos nos decían: Si llegamos y descargamos, vamos a cobrar el 100%”, explicó Goitia, quien reconoció que se ha “invertido en espacios en los que no ha habido asistencia y, por lo tanto, tampoco consumo”. A partir del mediodía tomaron la determinación de cerrar el tercer gune y, con ello, tuvieron que replantear toda la programación. Finalmente decidieron centralizarlo todo en la plaza, donde estaba establecido el segundo gune. “Hubo asistencia de gente, pero con lo que se consiguió en las barras de las txosnas no nos acercarnos ni de lejos al caché que tienen hoy en día los grupos de música”, reveló.

¿Y qué ánimo se respiraba ayer en la ikastola después de todo un año organizando la jornada? “Todavía no somos conscientes de las consecuencias”, expuso Ibon Goitia, quien explicó que Ibilaldia tiene dos objetivos: “uno es el económico y otro es el poso que deja, que dura prácticamente hasta el siguiente Ibilaldia”. En ese sentido, indicó que quedará en el recuerdo el hecho de que estuviera lloviendo durante todo el día. “Hay gente que el sábado terminó de montar el cuarto gune y a las 10.00 de la mañana ya lo estaba desmontando. Eso es un palo terrible”, indicó el director.

Solidaridad Con todo, Ibon Goitia destacó que también ha habido sorpresas positivas. “Esta mañana -por ayer- hemos tenido una quedada a las 9.00 horas para recoger lo que quedaba y ha habido una asistencia de padres que no me lo creía. Más de sesenta personas recogiendo todos los gunes. Había gente que incluso ha pedido libre en el trabajo para venir”, relató el responsable de Azkue Ikastola, quien indicó que, paradójicamente, el sol brilló desde las 8.00 de la mañana. “Ha habido cachondeo”, dijo Goitia, aunque destacó, sobre todo, que “nadie ha llorado. La gente aportaba ideas para darle la vuelta a la situación. Para mí eso es el reflejo de la salud de la comunidad de la ikastola de Lekeitio. No tienes tiempo ni de caerte, te llevan. Ha sido bonito”.

En la misma línea, el director del centro señaló que ha habido grupos como Nøgen que “visto lo visto” decidieron tocar gratuitamente. “No teníamos un escenario que ofrecerles porque la plaza estaba a tope. Al final tocaron a ras del suelo, delante de la Casa Consistorial, donde ofrecieron un concierto de 45 minutos mientras desmontaba un grupo y empezaba Esne Beltza. Fue un detalle enorme”, agradeció Goitia antes de mencionar que otros grupos, como Izaki Gardenak, también manifestaron su intención de no cobrarles. “Es gente que empatiza, que sabe que no estamos para que dos se enriquezcan, sino que es un proyecto de pueblo, de ikastola”, destacó.

A pesar de ello, las aportaciones económicas siguen siendo necesarias, por lo que el responsable del centro indicó que se han puesto “a disposición dos cuentas bancarias para que cualquiera que crea que debe hacer un ingreso lo pueda hacer”. Desde que se pusieron en funcionamiento las cuentas, el mismo domingo, “ha habido reacción”. Goitia destacó así la aportación que están recibiendo, tanto de gente que se presenta en la misma ikastola para entregar el dinero en metálico o mediante transferencias que se están realizando desde diferentes puntos de Euskal Herria. “Nos interesa que el proyecto de la ikastola siga adelante. Esperamos que durante esta semana siga así: con aportaciones mínimas de 5 euros hasta algunas más cuantiosas. Entre todos lo podemos conseguir”, animó.

Números de cuenta

Laboral Kutxa.

ES83 3035

0042 92 0420028507

Kutxabank.

ES86 2095

0114 60 9117934827