BILBAO. Varios pasajeros de la línea 5 del Metro de Madrid increparon el pasado martes a una mujer por recriminar, desde su asiento, a una niña de cinco años y a su madre, ambas extranjeras, por ocupar una de las plazas del vagón.

La mujer afirmó que los extranjeros cuando van a la Seguridad Social les atienden antes que a los españoles a pesar de que no la pagan. Ante estos comentarios varios pasajeros le recriminaron su actitud y le pidieron que se callase.