Donostia - El cadáver calcinado de un hombre fue localizado ayer por la tarde junto a un caserío de la localidad guipuzcoana de Aretxabaleta, una muerte que, según las primeras hipótesis, se pudo producir de manera accidental al incendiarse su ropa tras encender la caldera de su vivienda.

Según explicaron fuentes del Departamento vasco de Seguridad, a las 18.20 horas la Policía Vasca recibió la llamada de un particular alertando de que había encontrado un cadáver calcinado en una campa situada junto a un caserío del barrio Apotzaga-Etxebarri de Aretxabaleta. Al lugar se desplazaron varias unidades de la Ertzain-tza y un médico forense para certificar la muerte del hombre, de 60 años, que fue identificado como el propietario del caserío. Al parecer, el hombre encendió la caldera de su vivienda y el fuego alcanzó su ropa. - Efe