PALENCIA, Burgos, Valladolid, Salamanca y Soria, a través de plataformas ciudadanas, aspiran a dar la sorpresa en las urnas el 13 de febrero, la cita que abrirá en Castilla y León un nuevo ciclo electoral, dentro de los movimientos asociados a la España Vaciada, integrada por 170 colectivos de 30 provincias y 12 comunidades autónomas, unidos en el combate contra la despoblación y por el reequilibrio territorial, siguiendo la estela de la representación en el Congreso de Teruel Existe. Si nos trasladaramos a Castilla-La Mancha se hablaría de Cuenca Ahora, La Otra Guadalajara, SOS Talavera... "No somos el 15M Rural, nos gusta más ser el 31M", afirman, en alusión a la fecha en que esta revuelta inició el cambio como llamada de atención a los que lideran las instituciones y recordando que Talavera de la Reina o Cuenca, Soria, Zamora o Salamanca "no son zonas rurales, sino ciudades". Que no es simple cuestión de un territorio abonado solo a la agricultura y ganadería, sino de poblaciones que han llegado a una situación de hartazgo y necesidad por culpa de ciertas políticas. En lo que sí pueden asemejarse a aquella revolución que envalentonó a Unidas Podemos es en que aspiran a ser un "movimiento de conciencias".

La España Vaciada acelera y ya se da por hecha su presencia de forma aglutinada en los próximos comicios generales de 2023, donde algunos sondeos le otorgan entre 8 y 15 escaños que, previsiblemente y con la ley D'Hont en la mano, afectarían más al PP y a la pretensión de volver a La Moncloa de la derecha y su ala extrema, que ven detrás una "marca blanca" del PSOE. Tomás Guitarte, diputado de Teruel Existe, recuerda que "todas estas plataformas han estado trabajando muchos años sobre esta posibilidad, pero eso no significa que todas se conviertan en un partido político, sino que habrá esa herramienta o instrumento para participar los que quieran" en el proceso político, "sin que eso sustituya al movimiento social". Con esa filosofía se registró España Vaciada en septiembre como formación pero aún sin definir cómo se presentarían, como coalición de marcas distintas, como un grupo grande con el que se coaligan otros menores o como federación de partidos.

documento con 101 propuestas

Al margen de cuestiones locales puntuales, el mensaje sí está claro: "Un modelo de país diferente que busca corregir el modelo de desarrollo que hemos venido teniendo hasta ahora para encaminarlo hacia un reequilibrio territorial, para dar la oportunidad a todos los territorios de lo que llamamos un desarrollo sostenible en equilibrio territorial", proclama el diputado. El eje de su propuesta incluye las deficientes condiciones de vida existente en los 3.403 municipios del Estado en riesgo de desaparición. Entre las 101 propuestas de una documento de más de 300 páginas se hallan, entre otras, destinar el 1% del PIB contra la despoblación; declarar estratégico el sector agroalimentario y forestal; aprobar una discriminación positiva en los impuestos; recuperar el tren como elemento vertebrador del territorio; que las zonas rurales dispongan de buena conexión a Internet; tener garantizado el acceso a servicios sanitarios, educativos, sociales y de seguridad ciudadana en desplazamientos de menos de 30 minutos; contar con un parque público de viviendas de alquiler; dar una perspectiva de género a las políticas; o promover unas instalaciones comunitarias de energías renovables que generen empleo, respeten el paisaje y favorezcan el autoabastecimiento.

El atractivo de esta marca es que se trata de una opción transversal que puede ser apoyada por una amplia mayoría, como sucedió en la provincia de Teruel, donde fueron la opción más votada por encima de PP y PSOE. Su meta es que su filosofía trascienda y se les pueda votar hasta en Madrid. Como señala Guitarte, "para estar en contra del hambre en el mundo no hace falta pasar hambre". Sin ir más lejos, estudian presentarse allí y en Barcelona. En este último feudo hay un alto porcentaje de población emigrante, procedente del medio rural en busca de oportunidades laborales. En la provincia catalana cerca de un 8,5% proviene de las regiones que componen la España Vaciada. En el caso de la Comunidad de Madrid la cifra asciende hasta el 14,5%.

Lo que menos les importa es a quién pueden arrebatar los escaños ya que "no tenemos ni idea ni estudios demoscópicos, nuestro planteamiento no nace de a ver a quién puede afectar nuestra presencia o no, sino de que consideramos imprescindible nuestra presencia". Por eso también restan valor a la identidad de las personas, a los nombres, que podrían integran la candidatura. Lo explican con una metáfora o símil retrospectivo: "Cuando antes había un incendio en un pueblo todos acudían a apagar y nadie preguntaba si el de al lado pensaba como tú o tenías discrepancias con él, te ponías de acuerdo en una emergencia en acabar con un problema".

críticas del bipartidismo

A juicio de estos movimientos, el adelanto electoral acontecido en Castilla y León tiene como una de sus motivaciones frenar a esta España Vaciada en la comunidad, e intentar que esta herramienta de participación política "no estuviera creada a tiempo". Como explica una de las portavoces de Soria ¡YA!, Vanesa García, "no se puede dejar pasar la oportunidad de la que la ciudadanía soriana influya de verdad", no como hasta ahora, en la política estatal y autonómica. Las reacciones en partidos tradicionales como PSOE y PP no se han hecho esperar, algunas hasta con ciertos tintes despectivos, rozando la descalificación. Entre ellas la del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien llegó a calificar de "salvapueblos" a estas planchas a las que acusó además de "oportunismo político". Ellos insisten: "En la calle se nos ignora así que hay que ir donde se toman las decisiones. Se nos acabó el tiempo para solucionar los problemas y debemos dar el paso de abordarlos nosotros: o tomamos medidas o muchos territorios se mueren".

Antonio Saz, coordinador de la herramienta de la España Vaciada, insiste en que el objetivo es lograr "posiciones de consenso a medio y largo plazo". Pone el foco en las dinámicas parlamentarias actuales: "Un Gobierno aprueba una ley. Luego viene otro, la tumba y hace otra. No puede ser". Saz, también turolense de origen, pone como ejemplo las diferentes leyes de educación en el Estado español: 8 en 40 años de periodo democrático. Desde 1982, PSOE y PP han acumulado años en Moncloa pero sin una repercusión real en la solución que persiguen. Y eso, a pesar de que el actual Ejecutivo de Pedro Sánchez cuenta con un ministerio específico dedicado al reto demográfico. "Estuvimos prácticamente con todos los presidentes del Gobierno, pero nos dimos cuenta de que había un tope, un techo de cristal. Aunque te decían que en tus demandas tenían razón, luego nunca se pasó a la acción en cuanto salías del despacho con la palmadita en la espalda", evoca Guitarte. Y remata Saz: "Se nos acaba el tiempo. Si en dos años no hay medidas, muchos pueblos desaparecerán".

En Castilla y León saltan al ruedo sin subvenciones ni espacios electorales gratuitos, y lo que es peor, dando voz a la población que más difícil tiene ir a votar.