Unidas Podemos mantiene una postura diferente a la del PSOE para resolver el conflicto político en Catalunya pero emplaza al independentismo a aparcar su referéndum de autodeterminación para “más adelante” una vez se logren tejer nuevos consensos. La formación morada llevará a la mesa de diálogo que se celebrará a mediados de mes en Barcelona un documento con cinco ejes a negociar entre ambos gobiernos: la agenda de desjudicialización, el reconocimiento de Catalunya como singularidad nacional, la reforma del sistema financiero, el blindaje del autogobierno y “acabar en una votación en las urnas” que refrende todos estos aspectos.Así lo corroboró ayer el presidente del grupo de Unidas Podemos-En Comú Podem en el Congreso, Jaume Asens, quien se dirigió a los soberanistas para señalar que “no estamos en el momento de negociar el referéndum, porque se han roto puentes y el catalanismo los tiene que reconstruir”, por lo que pidió “no engañar a la gente” ya que el referéndum no sucederá de forma inmediata, dijo textualmente. El texto que expondrán en este foro bilateral será detallado el próximo miércoles en una conferencia por la líder de los comunes en el Parlament, Jéssica Albiach.

“Primero hay que ir a la mesa para intentar avanzar en los cinco ejes, para poder sacar un resultado que después sea ratificado en las urnas. Y en una segunda fase, más adelante, poner encima de la mesa la cuestión del referéndum. Desgraciadamente, no estamos ahora en este momento”, recalcó Asens en una entrevista en TV3. “Los consensos que había detrás del Estatut han saltado por los aires. La sociedad está más dividida en este momento y es en lo que nos debemos ocupar”, valoró el dirigente morado después de que esta misma semana Pere Aragonès vaticinara que ese referéndum se debería celebrar antes de 2030 y confiando en que haya avances que no hagan saltar por los aires las negociaciones.

Con todo, Asens reconoció que “la posición del PSOE -que sigue sin concretar si Pedro Sánchez estará presente en esa mesa- no es la misma que la que tenemos nosotros a la hora de resolver el conflicto”. En esa tesitura, reclamó a los socialistas que “no frenen” la vía de la “desjudicialización” y lleven a cabo la reforma del delito de la sedición, que es, bajo su punto de vista, “una bomba de relojería” judicial. Pero este objetivo no se halla dentro de la agenda legislativa de Moncloa en los próximos meses pese a que ha sido uno de los señuelos para seducir al independentismo. Asens reconoció que Unidas Podemos desconocía las intenciones del Gobierno de Sánchez de no reformar la sedición antes de que acabe 2021, un hecho que tildó de “deslealtad”. A su parecer, la desjudicialización no puede ser “a la carta”, en función de si al Ejecutivo le cae mejor o peor Oriol Junqueras o Carles Puigdemont, y es que la reforma del Código Penal en este sentido podría beneficiar tantos a los presos del 1-O indultados como a los dirigentes que se decantaron por el exilio.

el psc mira a la financiación

Por su parte, el PSC de Salvador Illa sigue instalado en el asunto de la financiación y prevé elaborar una propuesta de reforma que quiere acordar, desde la Generalitat, con los gobiernos de Baleares y Comunidad Valenciana, con quienes cree que comparte objetivos comunes, y que han solicitado otro modelo de financiación autonómica. El plan del autodenominado Govern alternativo, que ejerce como una especie de Ejecutivo de oposición al de Pere Aragonès, buscaría dotar de mayores recursos a Catalunya y consta de cuatro apartados: desarrollo económico, conocimiento, innovación e industria; derechos de ciudadanía y Estado del bienestar; territorio y transición ecológica, y federalismo y buen gobierno. En este contexto, entienden que “la CUP no puede marcar la línea del Govern, no puede ser quien condicione las políticas que se hacen en Catalunya”.

“Desconocíamos que se iba a frenar la reforma del delito de sedición, lo que sería una deslealtad”

Presidente de UP-En Comú en el Congreso