El caso Kitchen sobre el presunto espionaje ilegal desplegado en torno a Luis Bárcenas, encara una maratón de interrogatorios esta semana, cuando se sentarán ante el juez desde la ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal y su marido, hasta el excomisario José Villarejo, todos como imputados. La ex número dos popular lo hará mañana martes.

El juez que investiga esta supuesta operación "parapolicial", presuntamente pergeñada desde el Ministerio del Interior de Jorge Fernández Díaz en 2013 en busca de documentos que guardaba Bárcenas y que podían perjudicar al PP, intenta avanzar en sus pesquisas con la declaración en la Audiencia Nacional de hasta seis investigados. Entre ellos figuran antiguos cargos policiales, como el exjefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) José Luis Olivera o el excomisario Villarejo, pero también Cospedal o el exsecretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez, que ya ha declarado varias veces e involucró a su superior directo, Fernández Díaz.

La también exministra de Defensa está citada mañana martes, un día antes que su antiguo jefe de gabinete, José Luis Ortiz, y que su marido, Ignacio López del Hierro. Los tres están investigados por cohecho, malversación y tráfico de influencias. El juez sospecha que la intervención de Cospedal y López del Hierro pudo ser "decisiva" para captar como confidente policial en la operación a Sergio Ríos, entonces chófer de la familia Bárcenas, a través de Andrés Gómez Gordo, policía de máxima confianza de Cospedal y asesor cuando presidió Castilla-La Mancha.

El auto de imputación refleja una secuencia de anotaciones de Villarejo que presuntamente harían referencia a Cospedal y su marido mediante siglas como "MD" o "LH" ya desde 2012. Entre las notas que apuntarían a una posible participación de ambos, el juez destaca una de septiembre de 2013 donde se lee "COSPE" y "Control de LB", y también otra junto a "ANDI" (presuntamente Gómez Gordo): "muy contento por los datos que le di a Cospe". Pero las anotaciones no solo afectarían al matrimonio, también a José Luis Ortiz, antiguo jefe de gabinete de Cospedal, cuya aparición en las agendas bajo las siglas "Orti" o "JL" le resulta "llamativa" al juez dado que refleja una "dación de cuenta" de Villarejo hacia él.

Jueves, turno de Villarejo

José Luis Olivera será el primero en declarar, hoy, después de que el juez le imputase tras escuchar al principal investigador de Gürtel, el inspector jefe Manuel Morocho, quien le involucró en las presiones que dijo haber sufrido para apartarle del caso y eliminar nombres como el del expresidente Mariano Rajoy de sus informes sobre la presunta caja B del PP. Olivera dirigía entonces la UDEF. Morocho relató una conversación en la que Olivera le ofreció un puesto en Lisboa y en la que dijo recibir una llamada del exministro Fernández Díaz.

Cerrarán la semana de interrogatorios en torno alas pesquisas judiciales del caso Kitchen el ex número dos de Interior Francisco Martínez y Villarejo, citados este jueves y quienes ya han declarado más veces a lo largo de la causa, en la que el primero llegó a protagonizar un careo con Fernández Díaz ante sus opuestas versiones sobre la presunta participación del exministro de Interior. Al juez le llama la atención la fluida relación entre Martínez y Villarejo, de acuerdo a los pasajes de sus agendas, y cree incluso que Martínez asumió "de forma directa la obtención de información de forma diaria, resultando especialmente sorprendente que el secretario de Estado se involucre hasta ese nivel en un asunto de esta naturaleza".