Un preso de la cárcel alavesa de Zaballa de 35 años ha fallecido, al parecer sin signos de violencia, según confirmaron fuentes de Instituciones Penitenciarias. Según estas fuentes, su compañero de celda informó el pasado fin de semana de que este preso había aparecido muerto en su cama, por lo que se informó a la familia y al juzgado de guardia. El cuerpo del fallecido fue trasladado al Instituto de Medicina Legal, donde se le practicará la autopsia para determinar las causas de su muerte.La asociación de apoyo a presos Salhaketa denunció ayer que esta es la segunda muerte en lo que va de mes y la cuarta este año, y habló de causas no naturales. Instituciones Penitenciarias contabiliza tres en 2020, puesto que el cuarto fallecido era un preso en libertad condicional que murió en el hospital. Salhaketa censura “la política de ocultamiento” de estos fallecimientos, sobre todo durante la pandemia de coronavirus, y la “nula iniciativa de actuación por parte de las autoridades políticas y judiciales”.

La muerte se produce poco después de que se conociera que el preso de ETA Igor González Sola fue encontrado muerto en el interior de su celda individual de la prisión donostiarra de Martutene, al parecer tras suicidarse y haber intentado en anteriores ocasiones quitarse la vida. Había cumplido el pasado mes de marzo las tres cuartas partes de su condena de 20 años de prisión por los delitos de colaboración con banda armada, depósito de armas y falsificación de documento oficial. Su muerte provocó un intenso debate político y el presidente español declaró lamentar su fallecimiento. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, se abrió a revisar el protoco contra los suicidios.

iñaki bilbao

Por otro lado, ayer quedó en libertad Iñaki Bilbao Beaskoetxea tras pasar 28 años en prisión en los estados español y francés. Ahora mismo se le estaba juzgando por otro atentado en la Audiencia Nacional.