- Iñigo Urkullu no estuvo ayer solo en sus críticas a la gestión por parte del Estado de la crisis del coronavirus. Durante la videoconferencia de los presidentes autonómicos con Pedro Sánchez y varios de sus ministros, los presidentes de Galicia y Andalucía, Alberto Núñez Feijóo y Juanma Moreno, respectivamente, cargaron las tintas contra el anuncio exprés del cierre de servicios no esenciales.
Feijóo pidió que esta clausura se haga de forma “correcta y previsible”, de modo que no sea “abrupta” y se conceda “un tiempo” para ello. Mostró a su vez su preocupación por “desconocer con detalle” en qué consiste esta nueva medida del estado de alarma e insistió en conocer el contenido del decreto aprobado en Consejo de Ministros antes de su publicación en el BOE.
El presidente de la Junta andaluza se quejó en la reunión de las “dudas y confusión” que generó el anuncio de Sánchez del pasado sábado. Le recriminó que no se haya hecho de acuerdo con las Comunidades Autónomas y que las haya informado a posteriori, dado que son estas las que mejor conocen la actividad que es o no esencial en sus regiones.
