Gasteiz - El acto de despedida organizado para hoy al mediodía en el frontón Auzolana del casco antiguo de Gasteiz al expreso de ETA Oier Gómez, fallecido la pasada semana en Baiona a consecuencia de un cáncer, ha sido prohibido por un juzgado de la capital alavesa. Al parecer, la suspensión se ha producido a instancias de la Abogacía del Estado.

Fuentes del consistorio gasteiztarra explicaron ayer que efectivos de la Policía Local han entregado la notificación de la prohibición judicial a los convocantes del mismo. Por consiguiente, los organizadores del último adiós a Gómez decidieron suspender el evento, aunque anunciaron que hoy llevarán cabo una rueda prensa para denunciar la actuación judicial, según publicaron en las redes sociales las juventudes de la izquierda abertzale, Ernai. La cita ha sido fijada en la plaza Nueva, frente al edificio del Ayuntamiento, a las 13.30 horas.

Gómez, que cumplía una condena de 15 años en Francia y tenía pendientes de ejecución tres euroórdenes de España y Portugal, fue excarcelado en 2017 por la justicia francesa debido a un cáncer terminal, por el que murió el pasado 26 de enero en un hospital de Baiona a los 35 años. El fallecimiento del expreso gasteiztarra fue, precisamente, uno de los ejemplos de la “cruel política penitenciaria” que aplica el Estado para que Sare movilizara a centenares de personas en las concentraciones organizadas en Galdakao, Donostia y Gasteiz. La red de apoyo a los presos reclamó un cambio en la legislación y la libertad de los reclusos gravemente enfermos.

En la capital alavesa, el portavoz de la plataforma Inaxio Oiartzabal remarcó en declaraciones a los medios de comunicación antes del inicio de la manifestación que es necesario un cambio en la política penitenciaria del Gobierno central. Oiartzabal aseguró que el primer paso para ello debe ser la salida de la cárcel de los presos gravemente enfermos, quienes, según sostuvo, deben estar en casa para curarse y no salir de prisión en la última etapa de su enfermedad.

Dar pasos En este sentido, desde Sare afirmaron que esperan que la decisión de la Audiencia Nacional de suspender la condena del preso de ETA Asier Aginako por la grave enfermedad que sufre sea el “primer paso” de una política penitenciaria en la que se ponga en libertad a reclusos enfermos para “sanar” de su dolencia y “no para que suceda lo mismo que con Oier”. La marcha de Gasteiz estaba presidida por una pancarta en la que se podía leer “¡Presos gravemente enfermos a casa! Que Oier sea el último”. Mañana está previsto que se celebre un acto de despedida a este expreso etarra en la capital alavesa. - Efe / E. P.