- La primera dama de Estados Unidos, Melania Trump, tomó la palabra en la tercera jornada de la Convención del Partido Republicano para afirmar que Estados Unidos “necesita ahora más que nunca” el liderazgo de su marido, Donald Trump. Durante las intervenciones de los últimos días, el presidente y candidato a la reelección en los comicios del próximo 3 de noviembre ha contado además con las palabras de apoyo de otros miembros de su familia, sus hijos Eric y Tiffany. Melania Trump destacó la “honestidad” del candidato, que “no guarda secretos” y “siempre se sabe lo que está pensando, guste o no”.
Durante el tercer día del cónclave, además, el secretario de Estado, Mike Pompeo, culpó a China del coronavirus y alabó el traslado de la embajada de EE.UU. de Tel Aviv a Israel. Trump, por su parte, entregó la nacionalidad a cinco inmigrantes legales que utilizó para contraponer la inmigración ilegal. “Ustedes siguieron las reglas, obedecieron las leyes, aprendieron su historia, abrazaron nuestros valores y demostraron ser hombres y mujeres de la más alta integridad”, destacó.
En su esperado discurso, Melania Trump defendió cuatro años más para su esposo al frente de la Casa Blanca, lo que sería un honor, ha dicho, pues él “no pierde el tiempo jugando a la política”, sino que sólo busca la “prosperidad” y el “éxito” para Estados Unidos. “Creo que necesitamos el liderazgo de mi esposo ahora más que nunca para traernos de regreso una vez más la mayor economía y al país más fuerte jamás conocido”, dijo Melania, quien también destacó “todo el apoyo” que Trump le brinda en todo lo que hace.
La primera dama también tuvo palabras de consuelo para las víctimas del coronavirus en Estados Unidos, que ya suma más de 5,7 millones de casos y cerca de 178.500 fallecidos.
Tras el discurso de Melania Trump, el secretario de Estado, Mike Pompeo, a través de una videoconferencia grabada previamente durante su viaje oficial en Jerusalén del que todavía no ha regresado, aplaudió “las iniciativas audaces” que ha liderado Trump “en casi todos los rincones del mundo”.
“El presidente trasladó la embajada de Estados Unidos a esta misma ciudad de dios, Jerusalén, la capital legítima de la patria judía”, ejemplificó Pompeo para referirse a una maniobra interpretada como una provocación por parte de Palestina, que está siendo atacada por Israel con regularidad durante las últimas jornadas. El secretario de Estado subrayó también el “acuerdo histórico de paz entre Israel y Emiratos Árabes Unidos” que impulsó y “sobre el que se leerá en los libros de historia”.
Pompeo también ha alabado la política exterior llevada a cabo por el presidente de Estados Unidos, ya que con “su visión de ‘América Primero’ ha traído más seguridad y libertad” para el país.
El republicano también recurrió al argumento favorito de los republicanos durante los últimos días: atacar a China por la introducción del covid-19 en EE.UU. También se dirigió desafiante a Irán, Corea del Norte y Rusia, una “amenaza” que ya pueden “disuadir” tras lograr que Ucrania cuente con armas defensivas.
