Dublín - El Gobierno de Dublín confirmó ayer que rechazará la propuesta de la Unión Europea (UE) para abolir los cambios estacionales de hora, ante el temor de que el Brexit pueda establecer dos horarios en la isla de Irlanda.

El ministro irlandés de Justicia, el democristiano Charlie Flanagan, calificó de “muy preocupante” la posibilidad de que la provincia irlandesa bajo soberanía británica y la República de Irlanda tengan zonas horarias diferentes después de la salida del Reino Unido del bloque comunitario, prevista para el próximo 31 de octubre.

El gabinete de Gobierno, dirigido por el primer ministro conservador Leo Varadkar, ya ha dado el visto bueno para que el Ejecutivo plantee a Bruselas su rechazo a esta medida. La propuesta de poner fin a los cambios de hora dos veces al año responde a los resultados de la consulta pública planteada por la Comisión Europea más popular hasta la fecha, en la que 4,6 millones de europeos participaron y un 84% se pronunció a favor de terminar con esa práctica. Uno de los principales argumentos de los encuestados para rechazar el cambio de hora fue su impacto negativo en la salud, pues estudios recientes indican que el ahorro de energía por cambiar los relojes es “marginal” si se compara con las políticas actuales de eficiencia energética.

Dublín recordaba que Londres también se opone a este cambio y que, además, tampoco estaría obligado a aplicarlo cuando abandone la Unión Europea, por lo que las dos Irlandas podrían tener horarios diferentes durante seis meses al año. Según Flanagan, esa situación tendría un gran impacto en las comunidades que viven a ambos lados de la frontera, así como en la economía de toda la isla, altamente interconectada.

mosaico de horarios “Aunque reconozco que muchos están a favor de acabar con la práctica del cambio horario, la propuesta no es tan sencilla”, advirtió el ministro, quien opina que la adopción de esta medida podría crear un “mosaico” de horarios en toda la Unión Europea, con consecuencias negativas para, por ejemplo, el funcionamiento del mercado único. La decisión adoptada por el Ejecutivo irlandés, agregó Flanagan, es fruto de un amplio proceso consultivo llevado a cabo con todos los ministerios y con la ciudadanía.

Una encuesta oficial reveló que la mayoría de los irlandeses está a favor de mantener todo el año el horario de verano, a fin de tener más horas de luz en invierno, pero el 82% rechazó cualquier medida que pueda crear dos zonas horarias entre las dos Irlandas.

La isla de Irlanda y el Reino Unido comparten el mismo horario desde 1916. - Efe