PONTEVEDRA - La alcaldesa de O Porriño, Eva García de la Torre, aseguró ayer que los ferrocarriles no pasan por la localidad a 30 kilómetros por hora: “No es cierto que, por O Porriño, el tren tenga que pasar a 30 kilómetros por hora, porque -los trenes- no pasan a esa velocidad”.
El ministro de Fomento en funciones, Rafael Catalá, confirmó ayer que el tren fue desviado a una vía lateral porque había unos trabajos de mantenimiento en la zona, lo que conlleva una reducción hasta 30 kilómetros por hora, cuando por la vía principal se puede circular hasta 120.
Sobre esta línea, la regidora también explicó que se estaban efectuando obras en la vía para que este convoy no llegase tan lento a destino. De hecho, precisó que en Portugal se reacondicionó y electrificó la vía para conseguir mayor velocidad, objetivo que se logró al reducir en 45 minutos el trayecto. Ahora, en la parte española se estaba haciendo lo mismo. Al respecto, Eva García se mostró partidaria de plantear otras hipótesis como si la señalización era “suficiente” o si el maquinista había recibido la información de que tenía que reducir la velocidad en ese tramo, desde qué punto debía hacerlo y si había señales que así se lo indicaran.
En este sentido, afirmó que falleció “alguien que estaba haciendo su trabajo”, que llevaba “mucho tiempo haciéndolo” y que “estaba preparado para entrar en el pueblo a una velocidad determinada”. Por ello, considera que es necesario saber si la información de la que disponía el maquinista era “adecuada” para que el siniestro no se produjera. “Esperar que la investigación avance para buscar responsabilidades”, apostilló.
Cuestionada sobre las obras que se realizaron en la vía para que el convoy pudiera pasar más rápido, precisó que después de ellas hubo incidentes en el paso a nivel situado en el centro de la localidad. “Lo que pasaba es que no bajaban las barreras: pasaba el tren a toda velocidad y se bajaban dos barreras y una no”, narró la alcaldesa, quien aseguró que, aunque “Adif decía que el tren pasaba a menos velocidad”, hay vídeos y fotografías que prueban lo contrario. “Decía (Adif) que si había algún obstáculo en la vía o persona, que el tren tenía suficiente margen de parada...”, manifestó la regidora, que se limitó a añadir un “bueno” al respecto.
Sobre este asunto, indicó que tuvo una reunión en septiembre del pasado año con el director general de Adif, quien, según precisó la alcaldesa, “tenía conocimiento de los fallos de las barreras”: “Y como no habían dado con el quid de repararlo definitivamente cambiaron todo el sistema para que no volviese a haber el fallo de las barreras”, apuntó.
Asimismo, solicitó que se soterre la línea del tren al argumentar que cualquier circunstancia que haga descarrilar a un ferrocarril que circula a 120, 100, 90 o incluso 80 kilómetros por hora por el centro de la localidad puede provocar “una masacre”. “En una población con mas de 20.000 habitantes, por el centro del casco urbano el tren pasa a 120 kilómetros por hora y se hicieron trabajos en la vía para que se permitiera que pase más deprisa”, denunció la regidora, quien considera que si el descarrilamiento, en lugar de haber sido donde fue se produjera “un poco más arriba o en dirección contraria”, se podría haber metido en la plaza de abastos de la localidad. “Las consecuencias hubieran sido mucho peores”, destacó.
Además, la alcaldesa cuestionó que la máquina se encontrara en perfecto estado ya que de ser así, “no hubiera ocurrido nada”. “Algo se hizo mal para que se produjera este hecho tan lamentable”, zanjó. - Efe