Paco Juan Costa, La bisagra entre la Escuela y la Facultad de Bellas Artes

leioa. De Ibiza a Leioa pasando por Barcelona. Así se resume, a muy grandes rasgos, el periplo vital de Paco Juan Costa, autor que falleció el pasado domingo día 17 y que fue profesor de Bellas Artes. El actual decano de la facultad donde se imparten y se aprenden estas disciplinas, Josu Rekalde, reivindica la figura de Costa, después de que su fallecimiento pasara desapercibido en los medios de comunicación, no así entre sus amigos, personas como Rekalde o el crítico de arte Xabier Sáenz de Gorbea. A juicio de Rekalde quien fuera su profesor fue "la bisagra entre la vieja Escuela y la nueva Facultad de Bellas Artes".

Rekalde considera que Paco Juan Costa fue clave en las trayectorias artísticas de autores como Txomin Badiola o Darío Urzay. "Él abrió el Arte Contemporáneo y dio paso a la escuela de Oteiza, por ejemplo", explica el decano de la facultad citada del campus de Leioa.

Paco Juan Costa era originario de Ibiza, estudió en Barcelona y arribó a Bilbao en 1971. Igual que otros profesores formados fuera de Euskadi, forjó el núcleo inicial del claustro que puso en marcha los estudios de la Escuela de Bellas Artes de la capital vizcaina, en la que era director José Milicua, según explica el crítico de arte Xabier Sáenz de Gorbea. "Pronto se incorporó a nuestro contexto y dio alguna conferencia sobre arte en las exposiciones que, como la denominada Indiscriminada de 1972, tuvieron lugar en Barakaldo conformándose de modo asambleario".

Sáenz de Gorbea le describe como un pensador antes que creador, "por lo menos de cara al exterior. Es posible que con su muerte se conozcan otras facetas de su imaginativa y personal reflexión. Fue importante en la aprobación de unos planes de estudios al convertir el caduco sistema de Escuela en Facultad".

Soluciones muy interesantes Tuvo unos planteamientos que, según estima el crítico, ofrecían soluciones muy interesantes, como dar clase en grupo a fin de salvar las distancias entre teóricos y prácticos, proporcionando al alumno ángulos distintos respecto al trabajo artístico. "Lo que era -y tiene que seguir siéndolo- muy enriquecedor. Con su experiencia sabía motivar y perturbar los lugares comunes, dando unas muy interesantes clases de análisis de las formas".

Sáenz de Gorbea ensalza la labor de Paco Juan Costa quien supo aunar pasión por el saber y amor por la disciplina a través del rigor y una gran sensibilidad que proponía soluciones imaginativas y difíciles de contradecir.

Costa está considerado un teórico de la didáctica y de la cultura artística. También se dedicó a escribir textos, con voz muy personal, en catálogos de trabajos contemporáneos, caso de Rekalde Área 2, libro que recogía la actividad de un año en esta sala de la Diputación, y también para la serie de muestras que se denominó Ezkerraldea Plastika, cuyas exposiciones itineraron por la Margen Izquierda y la Zona Minera.

Hizo dibujos y quizás más obra, pero, al parecer, no exponía. "Como ha ocurrido con otros profesores recientemente jubilados, es una faceta que seguramente descubriremos de modo tardío. Su aportación a los estudios de Bellas Artes fue muy importante. Tuvo por la enseñanza un gran amor y no desdeñó sensibilidad ni un gran rigor analítico", concluye Sáenz de Gorbea.

Su fallecimiento ha pasado desapercibido en los medios de comunicación. "Llegó joven, aunque de Ibiza, se formó en Barcelona y fue los primeros profesores que hubo en Bizkaia de Bellas Artes. Como aquí no había, la mayoría vino de Barcelona y gracias a personas como él se abrió el Arte Vasco", agrega Josu Rekalde.

A juicio del decano de la Facultad leioarra, Juan Paco Costa fue como profesor "un padre para nosotros", apunta y va más allá en su testimonio al asegurar que el profesor "se volcaba con los alumnos, era paternalista. Apoyaba la iniciativa del alumno".