DESPUÉS de seis años en Londres, Itziar Coteron Guisasola, alma mater de BatBatean Productions, regresó a Bilbao a instalar su campamento base, a sabiendas de que en su oficio de producción audiovisual y eventos en directo, allí ya tenía una pica en Flandes. Itziar ha trabajado para las Olimpiadas de Londres, en la serie Juego de Tronos o en los MTV EMA Bilbao... pero es su voluntariado y su trabajo para la Asociación Zubietxe, que se dedica a personas en discriminación social, el que le proporciona más satisfacciones. En el tranvía, ese gusano loco que la traslada diariamente a su estudio en la calle Dos de Mayo, Itziar nos cuenta su historia y esa dualidad tan desconcertante.

Su carrera profesional arranca como cámara para los informativos de ETB y más tarde da el salto a la Universidad de Arte de Londres para cursar Producción en Eventos en directo y TV. En las Olimpiadas hizo sus primeros pinitos con asistencia de sonido. Y ahí empezó su locura creativa y su sueño de tener su productora. “Pero regresé porque quería volver a casa, con mi familia, con mis amigos... Ya sabía que las cosas eran más difíciles aquí”, reconoce desde un vagón que la conecta con su marca y el logo que ha creado, ese murciélago dentro de un uno, en un juego de palabras entre el euskera y el inglés que tiende puentes entre Bilbao y Londres.

Sin embargo, no fue ese puente el que le permitió lograr la asistencia en plató para Juego de Tronos sino el destino. “Creo que lo conseguí por mis conocimientos de inglés. Entré por una bolsa de trabajo que salió en el Ayuntamiento de Zumaia, me animé y allí me fui a hacer la cola”. “Yo estaba de asistente de localizaciones. Es decir, mientras se grababa, nos dedicábamos a mantener la continuidad entre las escenas”. Itziar Coteron trabajó codo con codo con los actores de esta megaserie de culto y se dedicaba prácticamente a seguir las huellas de Daenerys en la playa. “Sí, estábamos volcados en conseguir que no hubiera gazapos entre toma y toma”, explica gráficamente, reconociendo que es seguidora de la serie pero no friki.

Eso también lo demuestra su trabajo como jefa de equipo del montaje y desmontaje del escenario After Show - MTV EMA Bilbao. “Estuve en el BEC pero no en el escenario grande, sino montando el after party, justo enfrente de la alfombra roja”. Ella podía haberse plantado delante de Nicki Minaj, de Rosalía o de Halsey pero “solo las vi un ratito, por curiosidad”. “Cuando la tele estaba retransmitiendo la gala, estábamos a full. Teníamos que estar muy pendientes de que nada fallara. Disfrutamos más de los artistas en los ensayos”, revela.

Sin embargo, no es este trabajo de pedigrí el que tiene más a gala, sino sus vídeos para Zubietxe, que le recuerdan que una sociedad solidaria es una sociedad más habitable. “Me inicié con un trabajo para Libu, una tienda de libros de segunda mano que es un proyecto solidario promovido por Zubietxe que se dedica a la incorporación social de personas en exclusión. Gente muy vulnerable, desde inmigrantes, personas sin recursos, drogodependientes, personas con problemas mentales...”. “Y les hago vídeos, pero voy con la cámara con mucho respeto, sabiendo que estoy entrando en su casa. Y no solo les grabo, también comparto muchas cosas con ellos. Porque estas personas me enseñan mucho, me aportan todavía más, y me generan unas emociones preciosas”, declara esta mujer que vive la cara A y la cara B de la sociedad. Y las dos, con éxito.