Madrid - El periodista Antonio Lobato, que esta temporada volverá a ser la voz de la Fórmula 1 en Movistar+ tras dos años alejado de la competición, ha afirmado que nunca habría vuelto si tuviera que ser de nuevo “el hombre orquesta” que era antes, ya que ese nivel de “estrés” y “agotamiento” se hizo “insoportable”.
“Nunca hubiera vuelto si tengo que hacer lo que hacía antes: dirigir, presentar, narrar, hacer reportajes... Antes lo hacía todo, era el hombre orquesta, y el nivel de responsabilidad, de estrés, de cansancio, de agotamiento que me generó llegó un momento que era insoportable”, reconoció Lobato (Oviedo, 1965). Una decisión que ha “pensado en familia” y que ha tomado después de dos “años sabáticos” en los que no ha sentido “nostalgia” de la Fórmula 1 hasta casi finalizar la pasada temporada. “Es triste decirlo, pero yo no he echado de menos el negocio de la Fórmula 1. En 2016 me levanté para ver la primera carrera del campeonato en Australia, empezó la carrera y no sentí nada. Sentí tranquilidad y la disfruté como aficionado experimentado, y mucho más relajado”, dijo Lobato.
El periodista explicó que su labor será exclusivamente la de narrar los entrenamientos libres, la clasificación y la carrera, así como “estar en los previos y post” de las pruebas junto a Pedro Martínez de la Rosa y Toni Cuquerella. De las 21 carreras del campeonato, que comenzará el 25 de marzo, Lobato viajará a los grandes premios de España, Mónaco, Inglaterra, Francia e Italia, y “quizá” al de Abu Dabi. “Esa va a ser mi función; evidentemente, aportaré cosas, porque me salga o se me ocurra la idea, pero no porque sea responsable y tenga la obligación”, recalcó Lobato, que se ha “quitado del medio todo el estrés” de tener que buscar contenidos, hablar con equipos, pilotos, empresas o pelear por el presupuesto.
Lobato ha firmado por un año pero ha dejado la puerta abierta a ampliar su contrato: “Viendo de salida cuál va a ser mi papel, podría seguir porque no me quema y no me va a afectar. Mi vida va a seguir estando ordenada, no como en el pasado, que estaba muy desordenada y me perdía muchas cosas”. “Y, sobre todo, mi salud física y mental no se van a ver afectadas”, subrayó. - Efe