CHINA. El animal fue capturado en el agua, en la Reserva Shenzhen, al sur del país. Algunos científicos creen que puede tratarse de una especie de oso afectado por la contaminación.

En cambio, algunos de los usuarios de las redes sociales, creen que se trata de una legendaria "bestia acuática". Esto se debe al sorprendente tamaño de sus garras y la fiereza para destruir con sus dientes la jaula en la que está encerrado.

Por el momento, la ciencia no ha sabido determinar de qué animal se trata.