Basauri - Pertenece a la cuadrilla Basajaunak, trabaja en el bar Supier de la calle Balendin Berriotxoa y es una de las chicas más fuertes de Basauri. Aficionada desde muy joven al deporte en general y al monte en particular, Itxaso Arraskarate decidió hace poco más de un año empezar a competir en bodyfitness apoyada por su novio. Esa determinación le llevó a cambiar su día a día y a fallar a muchos planes de cuadrilla. Desde entonces, las visitas al gimnasio son algo mucho más serio y su alimentación absolutamente disciplinada. La consecución en mayo del campeonato de Euskadi de bodyfitness le impulsó a seguir con una apuesta deportiva que apunta alto, aunque esta joven, que en diciembre cumplirá 30 años, lo explica con mucha humildad mientras pasea por Basauri.

Las fiestas de la localidad concluyeron hace dos semanas, ¿pudo probar el zurrakapote?

-La verdad es que no. Los que nos dedicamos a esto no debemos beber. Comemos muchas proteínas y nuestra dieta en general es muy exigente con el hígado; el alcohol terminaría saturándolo. Además, tenemos que cuidar los niveles de grasa, sobre todo en las épocas previas a la competición.

Entonces, ¿ni el talo ni el zurrakapote casan con el culturismo?

-No, el zurrakapote de Basauri no es muy compatible con el culturismo, y los talos tampoco, a pesar de que me encantan (risas). En este deporte hay que ser muy fuerte mentalmente, hay que ser duro por fuera y por dentro. He disfrutado mucho de las fiestas de Basauri durante años, hasta que decidí tomarme en serio el culturismo. Desde septiembre de 2013 mi entrenamiento y mi alimentación son pura disciplina. Por ejemplo, por el día hago seis comidas, cada tres horas, y solo tengo una comida libre a la semana en la que me olvido de la dieta.

Dos años sin fiestas de Basauri, ¿las ha echado de menos?

-Más que la juerga, echo de menos el ambiente de día, el estar con los amigos o las comidas de cuadrilla. En todo 2014 solo he salido una noche y fue en fiestas de Bilbao.

¿Prefirió Aste Nagusia a las fiestas de San Fausto?

-No, lo que pasa es que agosto me lo tomé con más calma y fui más flexible con la alimentación. Las fiestas de Basauri son en octubre, y en septiembre empecé de nuevo con la disciplina para poder competir en primavera. Desde entonces estoy en una fase de lo que llamamos volumen para ganar músculo y en la que se gana bastante grasa también. Para mí las fiestas de Basauri son las mejores del mundo, tienen mucha personalidad.

¿Y qué le dicen de su nueva vida en Basajaunak, su cuadrilla?

-Mis amigas me dicen que lo deje ya, que me echan en falta. Yo he sido de ir vestida con el traje tradicional de la cuadrilla, de estar en la bajada, en las comidas... Y ahora no me ven el pelo.

¿Cómo le explicaría a una competidora de otro lugar cómo es Basauri?

-Diría que es un pueblo situado junto a Bilbao, no muy grande, pero muy agradable. Le explicaría que tiene muchas cuestas y a cualquier persona le invitaría a venir a las fiestas porque le iban a sorprender.

¿Y qué le diría sobre los basauritarras?

-Diría que somos como los de Bilbao, echados pa’ alante (risas). Creo que es un pueblo con personalidad.

¿Se cuidan mucho en Basauri?

-Yo creo que sí, siempre ha habido muy buenos deportistas. De todas formas, yo creo que eso de cuidarse está un poco de moda, aquí y en muchos otros sitios. En el caso de Basauri, tener el monte tan cerca quizá ayude y, por ejemplo, toda mi cuadrilla lo que más hace ahora es ir al monte.

El monte Malmasin se lo conocerá de memoria...

-Desde luego, he ido desde pequeña a todos los montes cercanos a Basauri y nos los conocemos de sobra. Aunque yo soy del barrio de Urbi, mis amigas son de Basozelai y desde ahí te plantas en un momento en el monte, es una suerte tenerlo tan cerca, otra ventaja que tiene Basauri. Ahora, cuando vamos al monte nos movemos un poco más, aunque yo me controlo a la hora de ir, ya que si haces mucho ejercicio cardiovascular puedes quemar más músculo que grasa.

Existe un grupo de facebook llamado ‘no eres de Basauri si...”. ¿Qué condición añadiría a ese enunciado?

-Diría que no eres de Basauri si no has vivido las fiestas como un basauritarra, yendo con el porrón de un sitio a otro.

¿Cuáles son sus rincones de Basauri?

-Las boleras, por ejemplo, me traen muy buenos recuerdos, es una zona muy tranquila. También me gusta mucho Basozelai porque está al lado del monte y por las pistas de skate, que también me traen recuerdos.

¿Y qué cambiaría?

-De Basauri no cambiaría nada, lo único, habilitaría más plazas de aparcamiento. Me gusta cómo es y me encanta la gente de aquí.

culturista y campeona de Euskadi en la categoría de bodyfitness