SAN FRANCISCO. El mundo tecnológico está plagado de historias de compañías gigantescas que se marchitan y mueren al verse superadas por nuevas tecnologías, pero pocas lo han vivido de una manera tan espectacular como la canadiense Research in Motion (RIM), que espera salvarse del colapso con dos nuevos smartphones que presentará mañana.
La Blackberry Z10 y la Blackberry X10 son la culminación de los años desesperados de RIM por dar alcance a Apple y a los nuevos teléfonos con el sistema operativo Android de Google.
Y aunque nadie espera que RIM regrese a la posición dominante que tenía como el fabricante predilecto de smartphones antes del lanzamiento en 2007 del iPhone, muchos inversores son optimistas acerca de que los nuevos celulares serán un sólido fundamento para el futuro.
RIM tiene un largo camino por delante. En 2008, cuando el iPhone era nuevo en el mercado, las BlackBerries constituían el 46 por ciento de todos los teléfonos vendidos. Eran un aparato de culto para muchísimas personas, desde el presidente estadounidense Barack Obama a la presentadora Oprah Winfrey.
Los usuarios hablaban en broma de su "CrackBerry", en un juego de palabras con la droga "crack", por la enorme adicción que significaba tener acceso a sus mails adonde quiera que uno fuera. De manera igual de importante, los empresarios adoraban los teléfonos porque permitían ubicar a sus empleados a cualquier hora del día y la comunicación era segura porque los mensajes iban encriptados.
Pero Apple mostró que los dispositivos móviles podían hacer más que transmitir e-mails y mensajes SMS. El resultado fue catastrófico para RIM. El año pasado, su cuota de ventas en Estados Unidos cayó a apenas el dos por ciento.
El director ejecutivo de RIM, Thorsten Heins, de 55 años, apuesta por que los nuevos modelos de la empresa revertirán esa tendencia.
Los teléfonos llevan el nuevo sistema operativo BB10, que ha sido muy elogiado. Parte del optimismo se basa también en los rumores de que la compañía será comprada por algún fabricante emergente de smartphones como Lenovo o Huawei.
Pero también hay entusiasmo por los aparatos en sí mismos, no solamente entre los "freaks" de la tecnología, sino también entre los entusiastas de los "gadgets" que sólo se sienten impresionados por lo más brillante, delicado y genial jamás inventado.
"Lo siento Apple, la Blackberry Z10 es más sexy que el iPhone", escribió Jesus Diaz en la web de dispositivos Gizmodo. En su comentario, se entusiasma con el diseño -el primer smartphone que no tiene ningún botón- y su software.
"Siempre he odiado los teléfonos BlackBerry", añade. "Unos ladrillos vergonzosamente feos... hasta la BlackBerry Z10. La BlackBerry Z10 es sexy. Un hardware realmente hermoso, elegante". ¿Pero será suficiente para evitar el declive de RIM?
Jan Dawson, jefa de analistas de telecomunicaciones en la firma Ovum, no está convencida, sobre todo porque el mercado se aparta de RIM en un área clave. "Las empresas ya no compran la mayoría de los smartphones que se venden hoy, y los individuos eligen claramente otros aparatos y no las BlackBerries cuando tienen capacidad de decidir qué comprar".
"No esperamos una rápida salida del mercado. Sin duda, 80 millones de suscriptores (con los que aún cuenta RIM) y ganancias en al menos algunos de los últimos trimestres permiten que la compañía continúe durante años", estimó. "Pero sus días de gloria han pasado, y sólo es cuestión de tiempo antes de que llegue a su final natural". d